Tras conocerse un fallido intento de fraude electoral en las elecciones a gobernador del Valle del Cauca, el Registrador Nacional, Carlos Ariel sánchez, afirmó que “implementar tecnología electoral ha sido nuestra mejor respuesta para combatir y acabar la corrupción”.

Sánchez Torres dijo que “es muy difícil garantizar que no haya funcionarios corruptos. Lo que nosotros garantizamos es que esas conductas individuales no tengan impacto alguno, gracias a las medidas técnicas y de trasparencia que impiden que se pueda alterar los resultados electorales”, y agregó que “técnicamente es imposible alterar los resultados de una elección como la del domingo pasado”.

Explicó que “la información se divulga de manera rápida a través de la página web de la Entidad. El pasado domingo en una hora y 10 minutos llegamos al 99% de la información de preconteo y en 2 horas teníamos publicado en la página web el 95% de los formularios E-14 suscritos por los jurados. Estos formularios se digitalizaron en 16 puntos distintos del departamento. Con esas velocidades y esa descentralización no es posible alterar un resultado electoral, y menos cuando desde la Reforma Política adoptada en 2011 el escrutinio que realizan los jueces de la República empieza tan pronto termina la labor de los jurados, el mismo domingo, y no dos días después”.

Agregó que la Registraduría cuenta con planes alternos de consolidación y divulgación de la información de preconteo, la cual se envía por distintas vías y es auditada por parte de los organismos de control y los partidos políticos.

“Ni siquiera en el ataque informático que aún se encuentra en investigación por parte de la Fiscalía General de la Nación, presentado durante las elecciones de marzo de 2010, donde se registraron 70.000 hits por segundo, para un total de 400 millones de intentos de acceso en contra de la página web de la Registraduría, los resultados electorales estuvieron en riesgo de ser alterados y se garantizó la confiabilidad de los mismos”, resaltó el Registrador Nacional.

Con el fin de conocer lo sucedido en el departamento del Valle, la Registraduría ya se inició la respectiva investigación disciplinaria en contra de Adriana Lucía Castro Guzmán, comisionada ante el Consejo Nacional Electoral; José Francisco Angulo Jaimes, de la Registraduría Distrital, y Alina Martínez García, de la Registraduría Nacional.

“Confiamos en que las autoridades competentes esclarezcan prontamente la dimensión real del fraude que se pretendía cometer y estamos listos a colaborar con la investigación en todo lo que se estime pertinente. Por nuestra parte, nos constituiremos en víctimas dentro del proceso penal que se adelanta y esperamos que todo se esclarezca de manera pronta”, agregó el Registrador Nacional.

“Lamentamos lo ocurrido en el Valle porque pese a que tenemos la certeza sobre la efectividad de los controles adoptados y la transparencia en el resultado electoral, un grupo exiguo de personas puede empañar el trabajo honesto de 3.500 funcionarios y minar la confianza que el país tiene en la Organización Electoral. Es imposible controlar la naturaleza humana, los intereses particulares y las expectativas de algunos políticos que pueden estar interesados en influir las elecciones de manera distinta a lo que quieren los ciudadanos, pero sabemos que la tecnología adoptada y el trabajo honesto realizado como institución garantizan que los resultados de ésta y anteriores elecciones reflejan la voluntad popular depositada en las urnas”.

El fraude electoral es una cadena que se puede presentar en cualquiera de las etapas del proceso: antes, durante o después de las elecciones. Por eso la Registraduría ha desarrollado múltiples blindajes, para cada una de las modalidades de fraude electoral:

• Trashumancia en Inscripción de cédulas: Se hizo un mapa de riesgo, se rediseñó el formulario, se le incorporaron medidas de seguridad y se lleva control a diario y público en la web, generando alertas tempranas.

• Manipulación del censo electoral: Desde el año 2008 el censo es público y se puede consultar a través de www.registraduria.gov.co. Este censo se audita por parte de los organismos de control.

• Irregularidades en inscripción de candidatos: se diseñó aplicativo en línea para poder verificar rápidamente los candidatos inscritos y darlos a conocer a la ciudadanía.

• Suplantación de jurados o jurados falsos: Se cruzan las bases de datos de jurados con las del Fosyga y otras para verificar jurados “falsos”.

• Suplantación de electores: Se ha aplicado identificación biométrica de sufragantes sobre un censo electoral superior a los 7 millones de votantes en los últimos 3 años.

• Cambiazo o alteración de pliegos electorales: Se publican en la página web los formularios E-14 suscritos por los jurados de votación el mismo día de la elección.