Una grave situación enfrentan desde esta madrugada los habitantes de Soacha, Cundinamarca, como consecuencia del paro emprendido por los conductores de buses y busetas de servicio urbano que exigen que se vuelva a implantar el “pico y placa” para el transporte público.

Alrededor de 1.200 conductores suspendieron actividades y parquearon sus vehículos a un costado de la Autopista Sur a la altura del puente peatonal de San Mateo y han anunciado que no levantarán la protesta hasta que los alcaldes de Bogotá y de Soacha, se pongan de acuerdo para reimplantar la restricción del “pico y placa”.

Aunque la importante vía no ha sido bloqueada, se registran graves problemas para el ingreso de vehículos a la capital de la república.

Además, ante la inexistencia de servicio, los habitantes del municipio cundinamarqués han tenido que hacer una larga caminata hasta el barrio Bosa de Bogotá para conseguir transporte hacia la capital de la república.

Según los líderes de la protesta, al levantarse el “pico y placa” para buses, busetas y colectivos en Bogotá, se ha aumentado significativamente la oferta de transporte y en la misma proporción se ha reducido el ingreso para los conductores.

Además exigen a las autoridades combatir con mayor eficacia la piratería en el servicio de transporte.