Con atención lúdica, campañas de aseo y distribución alimentaria, 150 indígenas Embera- Chami y Embera- Katios reciben apoyo de los guías del proyecto Misión Bogotá Humana del Instituto para la Economía Social (Ipes).

Con el objetivo de minimizar el impacto sicológico de su destierro, los niños de estas comunidades reciben de los guías de Misión Bogotá Humana, acompañamiento lúdico con juegos (salto de lazo, juego de balón y concéntrese, entre otros), paseos a parques y obras de teatro que les permite realizar actividades propias de su infancia.

“Es importante que se realicen ese tipo de actividades porque los niños se distraen y olvidan un poco la situación en que vivimos; además aprenden cosas nuevas que en nuestra cultura no se conocen”, aseguró Juan Borocuara, líder Embera Chamí.

Los guías complementan su labor con la distribución de alimentos cuatro veces al día, aportada por la Secretaria de Integración Social y campañas de aseo personal que incluye pediculosis, lideradas por la Secretaría de Gobierno.

La coordinación interinstitucional para el retorno y reubicación está a cargo de la Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas, que les garantizará condiciones de seguridad, voluntariedad, dignidad, sostenibilidad, acompañamiento sicosocial, así como la provisión de insumos y herramientas para huertas de seguridad alimentaria y entrega de semillas apropiadas en sus territorios.

“En el Gobierno de la Bogotá Humana continuaremos apoyando a los actores de la economía popular que buscan adaptarse a la ciudad, trabajando en la promoción de políticas en defensa y protección de sus derechos humanos, disminuyendo toda forma de segregación social”, afirmó Jorge Reinel Pulecio, director del Instituto para la Economía Social.

Esta población fue reubicada en los albergues Buena vida y Juventud Trabajadora por la Alta Consejería para los Derechos de las Víctimas, la Paz y la Reconciliación de la Alcaldía Mayor de Bogotá.