Los criminales ahora se disfrazan de estudiantes en las bibliotecas de Bogotá para estudiar a sus víctimas y hurtarles sus objetos de valor en las cercanías del lugar.
En días pasados, llegó a Radio Santa Fe la denuncia de un estudiante a quien le robaron su computador portátil, al salir de la biblioteca Luis Ángel Arango, en la localidad tercera de la capital.
Estos delincuentes aprovechan la oportunidad que brindan los estudiantes quienes utilizan las herramientas electrónicas que tiene la biblioteca para “marcar” a quienes llevan portátiles, tablets iPhones.
Los maleantes, quienes portan armas blancas, están por lo general bien vestidos y simulan leer textos o buscar libros en las estanterías para no despertar sospechas entre los usuarios de la biblioteca.
La particularidad de este caso, que al parecer no es el primero que se presenta en el sector rodeado de universidades, es que al universitario le exigieron expresamente la entrega del computador portátil, “porque ellos no necesitan otra maleta”, según manifestaron los ladrones. Al parecer desde el interior de la biblioteca ya tienen conocimiento de los equipos que portan los visitantes.
Una de las modalidades de hurto más frecuentes en las entidades bancarias, conocida como “fleteo”, se traslada ahora a las bibliotecas.
Escrito por Marco Méndez