Con 25 puestos de control se incrementarán medidas de seguridad, así como restricción al porte de armas de fuego, y patrullaje aéreo son algunas de las medidas anunciadas por las autoridades.

La última semana de agosto no sólo dejó pérdidas superiores a los 700 millones de pesos para Metrocali, tras los disturbios que se desencadenaron después del paro y la movilización de los transportadores de buses por las calles de Cali, sino a 18 personas judicializadas por los desmanes del pasado miércoles.

Sumado a eso, la explosión de dos artefactos en el barrio El Refugio del sur de Cali dejaron a seis miembros de la policía, un reportero gráfico del diario El Tiempo y a un transeúnte heridos. Pero, horas más tarde, los disturbios ocasionados por un grupo de encapuchados en la sede Meléndez de la Universidad del Valle terminaron con la muerte del subintendente del Esmad José Libardo Martínez Trejos.

Para garantizar tranquilidad a los caleños tras estos altercados, la Policía Metropolitana anunció que durante el fin de semana empezará a regir la restricción de porte de armas de fuego, se instalaran 25 puestos de control en diferentes sectores de la ciudad y se continuará con el patrullaje aéreo, con el fin de controlar la ciudad y mantener la calma en los habitantes.

El comandante de la Policía de Cali, general Fabio Castañeda, repudió una vez más la muerte del uniformado y la forma como encapuchados agredieron con armas de fuego a hombres del Esmad, a la vez que anunció que se realizan investigaciones para dar con las causas y culpables de la muerte del subintendente. La recompensa por información de la ciudadanía por información sobre este hecho es 20 millones de pesos.