El huevo de gallina constituye un alimento habitual en la dieta de los humanos, es reconocido por su valor nutricional ya que aporta proteína, lípidos, vitaminas y minerales. El consumo per cápita (PC) a nivel mundial es variado, durante el 2009 en países como Estados unidos el consumo PC era de 294, España 284, Francia 237, Paraguay 378, México 417 y Colombia 212. Para el 2011 en Colombia el consumo PC fue de 234, según datos de la Federación Nacional de Avicultores de Colombia, FENAVI. (Federación Nacional de Avicultores de Colombia, 2012).

En Colombia; según el ENSIN 2010; el 94% de la población consume huevo en un mes regular, 27,7% lo consume diariamente, 65,1% lo consume de forma semanal y 3,6% refiere un consumo de entre 3 y una vez al mes. Los que consumen huevo semanalmente, el 30,8% consumen huevos de 3 a 4 veces a la semana. (Bienestar Familiar, 2010)

Los beneficios de consumir huevo de una forma regular se pueden resumir varios aspectos:

1. Contenido nutricional del huevo:
El huevo es reconocido como un alimento muy popular no solo por su versatilidad, sino también por ser un alimento nutritivo. Un huevo grande aporta aproximadamente 6 g de proteína de alta calidad biológica (3.6 g en la clara y 2.7 g en la yema), 5.2 g de grasa y su aporte de carbohidratos es mínimo. Así mismo, se reconoce como fuente de vitamina A, ácido fólico, colina, fósforo y selenio, y rico en vitamina D, riboflavina, vitamina B12 y biotina.

2. Proteína de alto valor biológico:
La proteína del huevo tiene un valor biológico muy alto (97 en una escala de 100), ya que contiene todos aminoácidos esenciales.

La clara es una es una solución de proteínas, dentro de las cuales es importante resaltar la ovoalbúmina, la ovotransferrina, ovomcoide, ovomucina, lisozima, avidina y ovoflavoproteína. La yema también contiene proteína y las principales son lipovitelina, lipovitelenina, livetelina, fosvitina y ovovitelina.
La calidad de la proteína del huevo supera incluso a la proteína de la leche, carne o pescado, esta característica hace que se emplee como patrón para medir la calidad de otras proteínas y su proporción de aminoácidos es la más adecuada, por lo cual su consumo dentro de una alimentación balanceada puede prevenir un déficit de los aminoácidos esenciales.

3. Perfil lipídico del huevo:
La grasa, principalmente contenida en la yema, está básicamente conformada por ácidos grasos saturados, poliinsaturados, y monoinsaturados.

4. Contenido de vitaminas y minerales:
En el huevo se encuentran cantidades importantes de vitaminas tanto hidrosolubles, como liposolubles, esta característica permite que el huevo contribuya al aporte de una cantidad considerable de las necesidades diarias de ellas.

Dentro de las vitaminas es importante resaltar su contenido de vitamina D, ya muy pocos alimentos son fuente de esta y en las dietas el porte de esta vitamina es relativamente bajo.

5. Antioxidantes del huevo:
El huevo aporta carotenoides como la luteína y la zeaxantina, componentes que tienen un efecto benéfico especialmente en la salud visual contribuyendo a reducir el riesgo a desarrollar cataratas y degeneración macular relacionada con la edad.

El huevo, por su contenido nutricional es importante para todas las edades ya que aporta nutrientes fundamentales para cada etapa de la vida. Durante la infancia, su contenido de proteína, vitaminas y minerales es indispensable para el crecimiento, el desarrollo visual y cerebral de los niños y adolescentes.

En el embarazo y la lactancia, se ha visto su importancia en la alimentación, nuevamente por su contenido de proteína, pero especialmente por su perfil de ácidos grasos y la cantidad de colina que aporta. Estos nutrientes son necesarios para un adecuado desarrollo del feto.

En personas mayores, el huevo tiene una gran utilidad en la alimentación, ya que además de ser un alimento con gran valor nutritivo, es apetecible, de fácil digestión y masticación