Se entregó el segundo de ‘Los Comba’ al gobierno norteamericano
Luis Enrique Calle Serna se entregó, al parecer, tras comprometerse a facilitar a la justicia estadounidense las redes que utilizaba el cartel del Norte del Valle, para distribuir cocaína en el viejo continente.
Los narcotraficantes denominados ‘Los Comba’ construyeron en el último decenio un ‘narcoimperio’ que tiene presencia en varios departamentos, especialmente en el Valle del Cauca.
El general José Roberto León, director de la Policía, corroboró la entrega de este delincuente y se espera que revele más detalles del sometimiento del segundo en la cúpula del cartel.
En mayo del año 2012, Javier Antonio Calle, hermano mayor de Luis Enrique, se entregó en Aruba a la DEA y en la actualidad se encuentra preso en un centro penitenciario de Estados Unidos.
Javier Antonio fue uno de los sicarios, que estuvieron al servicio del cartel del Norte del Valle. Cerca del año 1993, era un experto en el manejo de armas. Este fue escogido para ser partícipe de la masacre de Riofrío, en el departamento del Valle.
Javier Antonio responde a tres alias dentro de la organización de sicarios de ‘Los Rastrojos’: le dicen Comba, Combatiente y El doctor.
De la mano de Wílber Alirio Varela, alias Jabón, Calle fue escalando puestos en el cartel del Norte del Valle y `Jabón` lo convirtió en su mano derecha cuando mató a sangre fría a alias Nico, el jefe de seguridad de los hermanos Rodríguez Orejuela, jefes del cartel de Cali.
‘Los Rastrojos’ fueron financiados por Ramón Quintero, y enfrentaron a ‘Los Machos’, la banda de Don Diego. El infiltrado comprobó que el hombre de confianza de Javier Antonio Calle Serna es alias Galleta o Felipe. Presuntamente existe información de que dirige bandas sicariales conocidas en Cali como ‘Los hermanos Aristizábal Gómez’, ‘El Flaco Gerson’, ‘El Cortijo’, ‘Las Pelusas’ y ‘Alpiano’.
Luis Enrique Calle Serna, hermano menor de Javier Antonio, fue llevado por él para hacer parte de la estructura criminal de alias Jabón. A sus 21 años entró a la organización por la promesa que le hizo Varela de financiar sus estudios de aviación.
Escrito por Juan Sebastian Obando Sastre