El contralor distrital, Diego Ardila, se pronunció en Radio Santa Fe sobre un contrato de 57 cámaras para las patrullas, que suscribió el Fondo de Vigilancia y Seguridad de Bogotá y la firma Verytel S.A. y que no están cumpliendo su función.

Estas cámaras tuvieron un valor cercano a los 90 millones de pesos, cada una, pero todas las videocámaras se encuentran instaladas en los vehículos policiales y “lo preocupante es que ninguna de estas está prestando su servicio” anunció Ardila.

También explicó que “se cambiaron las especificaciones técnicas con las que se contrató, y el mecanismo que se les había diseñado. Cuando la patrulla va caminado por la ciudad detecta que hay una placa que tenga problemas con la justicia”, y deberían accionar automáticamente una alarma.

“Ninguna de estas cámaras está prestando ningún servicio”, según el Contralor de Bogotá, a veces confunde las placas de los vehículos con las direcciones de las residencias.

Este problema “genera una incomodidad a la radiopatrulla y una responsabilidad a los policías en la medida en que no aparecen esos inventarios”, puntualizó el funcionario.

El Contralor denunció la situación a modo de “advertencia para que le Fondo de Seguridad y Vigilancia tome las medidas para que ellos, a través de la Ley 80, ejerzan todas la acciones para enderezar todas estas situaciones”.

Esta problemática también se está viviendo en los planteles distritales con las videocámaras que se contrataron, “incluso a las salida de los colegios para la salida de los estudiantes y en el interior de los colegios, ninguna de estas cámaras está en funcionamiento”, manifestó.

La Contraloría Distrital se encuentra verificando si las cámaras que están en las fronteras de la ciudad están funcionando o no.

Escrito por Juan Sebastián Obando Sastre