El cuartel general del Gobierno de Hamas en Gaza quedó destruido por una serie de bombardeos aéreos israelíes la mañana de este sábado, durante la cuarta jornada de la operación “Pilar de defensa” en territorio palestino.
El edificio, situado en el barrio Naser de la ciudad de Gaza, quedó prácticamente destruido, según testigos y responsables de Hamas. No se señalaban víctimas la mañana del viernes.
El Ejército israelí “tenía como objetivo el cuartel general (del jefe de Gobierno de Hamas) Ismail Haniyeh en Gaza”, confirmó un portavoz del Ejército. “En las últimas seis horas, el IDF (ejército israelí) atacó 85 nuevos emplazamientos terroristas”, precisó el Ejército en su cuenta oficial de Twitter.
El Gobierno israelí movilizó la noche del viernes a 75.000 reservistas del Ejército en previsión de un posible ofensiva terrestre contra Gaza, después de unos cohetes disparados desde la franja de Gaza apuntaron contra Tel Aviv y por primera vez Jerusalén.
Israel bloqueó todas las carreteras principales alrededor del pequeño territorio palestinos de 362 km2, pobre y superpoblado, cerca del que se concentraban transportes blindados de tropas y excavadoras.
Un total de 30 palestinos han muerto en tres días y 280 resultaron heridos, afirmó la noche del viernes un portavoz de los servicios de salud de Hamas.
Tres israelíes murieron el jueves al impactar en el sur de Israel un cohete lanzado desde Gaza.
Unos 500 operativos oreás israelíes se han registrado desde el principio de la operación, según fuente médicas.
Israel lanzó su operación el miércoles con el asesinato con un ataque aéreo del jefe militar de Hamas, Ahmed Jaabari, el responsable más importante de la organización desde la operación “Plomo endurecido” (diciembre de 2008-enero de 2009) que no había logrado detener el lanzamiento de cohetes palestinos.
Desde el miércoles 357 cohetes fueron lanzados desde Gaza contra Israel, de los cuales 197 fueron interceptados con el sistema antimisil “Iron Dome”, indicó el ejército.
La escalada de violencia sigue en aumento a pesar de los llamamientos internacionales a la calma y a la breve visita este viernes en Gaza del primer ministro egipcio Hicham Qandil, cuyo país denunció “una flagrante agresión [israelí] contra la humanidad” y prometió que no dejaría “sola” a Gaza.
Malasia y Egipto abogaron por el envío de “mediadores internacionales” para intentar detener la escalada de la violencia, indicó el Gobierno de Malasia en un comunicado.
Rusia, Estados Unidos y la Unión Europea, pidieron a Egipto, dirigido por los Hermanos Musulmanes, el movimiento del que surgió Hamas, que utilice su influencia para calmar la situación.
Hamas, un movimiento que predica la lucha armada contra Israel y se niega a reconocer su existencia, recibió este viernes el apoyo de manifestantes en Cisjordania, Irán, El Cairo y en los campos palestinos en el Líbano, donde el movimiento chiíta Hezbolá se felicitó de los ataques contra Tel Aviv.
Cuba condenó enérgicamente los ataques israelíes.
En Cisjordania, Mahmud Abbas aseguró que la ofensiva israelí no frenaría la demanda de Palestina de convertirse en estado no miembro de la ONU, prevista el 29 de noviembre a pesar de la oposición de Israel. AFP