Judicial

Atribuyen masacre en Buenaventura a reunión fallida entre Rastrojos y Urabeños

Las autoridades señalaron que la masacre de 10 personas que se registró este domingo en el corregimiento de Alto Potedó, zona rural de Buenaventura, pudo obedecer a una reunión entre miembros de las bandas criminales de ‘los Rastrojos’- y ‘los Urabeños’, quienes adelantan una fuerte disputa por el control de las rutas del narcotráfico en el Pacífico colombiano.

De acuerdo con primeras versiones, al parecer una facción de la banda ‘la Empresa’ -al servicio de ‘los Rastrojos’- e integrantes de ‘los Urabeños’ se habrían citado para lograr una tregua.

Los cadáveres, ubicados al lado y lado de la carretera del balneario Potedó, fueron hallados por la policía, los primeros tres cuerpos fueron encontrados el jueves, pero hasta ayer la cifra de muertos sumaba 10 y se busca al menos a una persona más quien estaría en la espesura de la selva.

Uno de los hombres que resultó herido durante el enfrentamiento es custodiado por parte de las autoridades de policía en Buenaventura.

Las autoridades estiman que se trataba de 14 personas, quienes se movilizaban en tres camionetas blindadas y vestían prendas finas.

Inicialmente han sido identificadas nueve de las víctimas de esta masacre.

Se trata de Gabriel Díaz Montaño, de 18 años, Andrés Felipe Rivera, natural de Jamundí, Alexander Candelo Cuero, Edwin Vladimir Valencia Rodallega, de Buenaventuara; José Arbey Viáfara de 21 años, Walter Venté Molina, de 21, su padre Cirilo Venté y Diego Fernando Riascos, uno de los últimos encontrado asesinado entre el monte.

Otros cuerpos fueron encontrados cerca de un balneario, ubicado en este corregimiento sobre la antigua vía al mar. Hasta el momento las autoridades no han precisado si se trata de una guerra entre ‘Rastrojos’ y ‘Urabeños’, pero la carretera Simón Bolívar se encuentra militarizada.