–A un humilde operario de una funeraria del municipio de Tuluá, en el departamento del Valle, desconocidos le cosieron la boca con hilo y le pegaron los ojos con boxer.
La víctima del salvaje y atroz hecho fue identificado como Francisco Tamayo Rubio, de 42 años, quien poco recuerda de lo sucedido porque al parecer los sujetos le suministraron escopolamina.
La Policia informó que encontró a la víctima del cruel ataque con un letrero que decía “por sapo” y que inmediatamente lo llevó a un centro asistencial donde recibió atención de urgencia.
Según lo indicó la policía, la víctima solo recuerda que fue secuestrado por unos sujetos que se identificaron como guerrilleros que lo acusaron de ser informante de las autoridades.
El macabro hecho fue atribuido a una de las bandas criminales que controla el tráfico de narcóticos y la extorsión en Tuluá.