Tras tres semanas de paro por parte de los sindicatos de la exportadora de carbón, Cerrejón, la empresa se declaró en emergencia a raíz de los embarques del mineral que se encuentran represados en puerto sin poder llegar a destino.
Según lo informó el martes la comercializadora CMC, de propiedad de Cerrajón, en las últimas horas la carbonera declaró fuerza mayor sobre algunos de sus embarques. Esta figura permite a las firmas suspender sus obligaciones contractuales ante eventos inesperados como huelgas y desastres naturales.
El presidente ejecutivo de CMC, Howard Gatiss indicó que alrededor de 10 embarcaciones no han podido cargar carbón tras la parálisis de trabajadores que inició el 7 de febrero pasado.
El ejecutivo señaló que “La fuerza mayor se ha declarado en al menos algunas de estas naves. Mientras la huelga continúe no seremos capaces de cumplir con nuestras obligaciones con los clientes”.
“Nadie sabe cuánto tiempo durará la huelga y estamos en conversaciones para reprogramar los envíos”, agregó.