El Presidente Juan Manuel Santos, tras finalizar el último ciclo de conversaciones entre Gobierno y Farc en La Habana, hizo una fuerte advertencia a la guerrilla al señalar que en la mesa de conversaciones no se negociará nada que esté por fuera de la agenda y reiteró que propuestas como las de una Constituyente o anuncios como el de que no se entregarán las armas, son inaceptables.

Juan Manuel Santos recordó que al comenzar las negociaciones se afirmó que no se iba a discutir ninguna política pública, ninguna reforma fundamental del Estado, sino unas reglas de juego para que las Farc cambien las balas por los votos.

“Y que si quieren reformas del Estado, pues que las persigan, que las propongan en los canales normales de la democracia, en las plazas públicas. Y si ganan las elecciones, aprueben esas reformas. Pero por ningún motivo —se lo dijimos desde el primer día— vamos a hacer la revolución por decreto en la mesa de negociación en La Habana”.

El Mandatario subrayó que si hay buena fe en las Farc, “deben dejar de pedir lo imposible, porque ellos saben perfectamente que no se les va a conceder”.

El Jefe de Estado advirtió que la orden para la Fuerza Pública es que hasta que no se alcance un acuerdo de paz con las Farc, no baje la guardia.

“La orden a la Fuerza Aérea, como ha sido la orden a todas la Fuerzas, es que su deber en este momento, hasta que no firmemos algún acuerdo, es seguir atacando el terrorismo, atacando todas las fuentes de violencia en este país”, manifestó el Presidente Santos.

De igual manera el Mandatario respondió a los cuestionamientos sobre el hecho de que los diálogos se realicen sin tregua y explicó que las operaciones militares continuarán porque esa fue una condición que se planteó por parte del Gobierno para abrir las negociaciones.

“¿Cómo así se preguntan, que estén conversando allá en Cuba y aquí estén combatiendo? Pues bien, esa es la condición que pusimos nosotros porque entendemos y tenemos muy claro que así es como llegaremos más rápido a la paz”, señaló el Jefe de Estado.

“Bajar la guardia, debilitar nuestra ofensiva, lo único que produce es un prolongamiento de este conflicto”, concluyó el Presidente Santos.