Las autoridades del Valle del Cauca continúan con el operativo para dar con el paradero del cuerpo del exdiputado y excongresista, Octavio Zapata, quien resultó muerto el pasado 27 de junio en un episodio de paseo millonario en el sector de Chipichape en el norte Cali.

Tras capturar a siete presuntos miembros de la banda que habría asaltado y causado la muerte a Zapata, uno de los sujetos confesó que el político murió por una sobredosis de escopolamina, por lo que sus captores se deshicieron del cuerpo arrojándolo al río Cauca.

Tras conocerse los hechos, la Policía desplegó un dispositivo en las aguas del afluente, donde se han realizado constante patrullaje por las riberas en busca del cuerpo del exdirigente.

El director de la Policía, general José Roberto León Riaño, informó que Octavio Zapata fue abordado por una mujer el pasado 24 de junio y está lo habría entregado a la banda de asaltantes, quienes lo llevaron a una finca ubicada en el corregimiento La Dolores, en Palmira, allí habría recibido una alta dosisi de escopolamina lo que le causó el deceso.

“Fue posible determinar que el político fue asesinado gracias a declaraciones entregadas por uno de los responsables del crimen que confesó lo sucedido. Luego de la desaparición del exdiputado se nombró un equipo del Gaula para investigar. Se descubrió que se trataron de hacer unos movimientos con la tarjeta de crédito en Bogotá y así logramos desmantelar la banda de siete personas”, señaló el general León Riaño.

Los siete detenidos tendrán que responder ante las autoridades por los delitos de desaparición forzada, hurto calificado y homicidio.