os días después de la caída del edificio Space, en el barrio el Poblado de Medellín, la familia de Juan Esteban Cantor, oraba al costado de la derrumbada construcción por la vida del joven de 22 años. Lastimosamente minutos después recibieron la noticia de que el cuerpo de Juan Esteban había sido hallado son vida.

El familiar que acudió a la construcción a identificarlo acudió y miró fotografías que miembros del cuerpo de socorro hicieron. Identificó las medias, su pantaloneta verde, los tenis e incluso su cabellera.
La noticia llegó pese a las afirmaciones de su hermana Ángela Cantor cuando días antes dijo: «Lo visualizamos que sale de allí vivito».

El joven cumpliría 23 años el 30 de noviembre y estaba terminando sus estudios de comunicación social en Eafit. Había ejercido como periodista en el Canal U y en el periódico El Mundo.

«Era una persona muy entregada a la profesión, a sus amigos y a su familia. Carismático, nunca le faltaba una sonrisa en el rostro», recordó Daniel Gonzales su colega y amigo.

Su familia lo define como «la felicidad y el amor reunidos en una persona. Digno de admirar, dispuesto a brindar amistad. Compinche de su mamá, de sus hermanos y de su sobrino Maxi, su gran amor».
Perla Toro fue su docente en Eafit y, al igual que su hermana Ángela, acude a la palabra inquieto para referirse a él y destacar su energía a la hora de asumir su profesión, con entrega y dedicación. Tanto, que no dudaba en llamar a su profesora para pedirle un poco más de tiempo y así entregar un trabajo de excelente calidad.

El joven se encontraba llegando al conjunto residencial en el que habitaba, cuando este comenzó a colapsar y decidió quedarse a grabar el hecho y fue alcanzado por los escombros que descendían de la construcción.