El gol marcado por Deportivo Pasto en el juego de ida frente al conjunto brasileño Ponte Preta, no fue suficiente para avanzar a la siguiente fase de la Copa Sudamericana.
El equipo nariñense fue insistente, pero no las dos anotaciones de diferencia que los brasileros consiguieron en el partido de ida, en San Pablo, les alcanzó para avanzar en el torneo internacional.
“Saber defenderse también es una buena opción de triunfo en el fútbol, más cuando se tiene dos goles de diferencia”, así resumió el técnico Jiorginho, el juego que le dio el pase a los cuartos de final de la Copa Sudamericana.
En la primera el Ponte Preta armó un doble bloque defensivo y siempre esperó el ataque de los colombianos, que desde el pitazo inicial debía desequilibrar el marcador, para descontar en global que estaba 2 por 0, a favor de los visitantes.
Por su parte Pasto profundizó por los costados, llegando hasta línea final, de donde los laterales Marlon Piedrahita y Fausto Obeso, siempre tiraron el balón dentro del área, con la intención que los delanteros Mina y Lalinde embocarán el balón en el pórtico defendido por Roberto.
Los 45 minutos se desarrollaron en territorio ‘Carioca’, quienes solo tuvieron tres escaramuzas sobre el arco defendido por Lucero Álvarez, después de lanzarse en contragolpe.
La opción más clara de gol se produjo en el minuto 43, cuando Fram Pacheco remató de media distancia y el balón caprichosamente golpeó contra el palo izquierdo del pórtico ‘Macaca’.
Para la parte complementaria el equipo ‘Tricolor’ no bajó la guardia y atacó con más fortaleza, motivo por el cual muy temprano, cuando se jugaba el minuto 52, Mauricio Mina recibió un balón dentro del área y tras eludir la marca de los centrales, remató a ras de piso hacía el lado derecho del portero Roberto, quien impotente miró como el balón tocaba la malla.
El gol tempranero ilusionó a los hinchas pastusos, que confiaban en que se pudiera empatar la serie.
Los brasileños con el gol en contra no cambiaron su actitud defensiva y plantearon una doble línea de cuatro en el fondo, que se convirtió en una muralla irrompible.
Tampoco la efectividad jugó a favor del equipo nariñense, puesto que los delanteros dilapidaron claras opciones de gol, sumado a que en el minuto 82, nuevamente el palo evitó el festejo nariñense, tras un potente remate de Mina.
El tiempo se fue encima de las intenciones del equipo colombiano, que con el pitazo final, quedó por fuera de su segunda participación de la historia en la Copa Sudamericana.