El director de la Inpec, general Gustavo Adolfo Ricaurte, anunció que pidió a la Procuraduría General de la Nación que ponga la lupa sobre la investigación que se adelanta por la extraña muerte del juez Hugo Carmelo Ortiz, registrada el pasado 16 de abril al interior de la cárcel La Picota en Bogotá.

El general Ricaurte explicó que el mencionado juez fue llevado al centro carcelario luego de ser condenado por el delito de prevaricato.

Ricaurte señaló que “el interno permaneció en estas celdas 14 horas, los funcionarios del establecimiento penitenciario evidenciaron conductas presuntamente psicóticas, por lo cual se solicitó la valoración psiquiátrica del interno”.

Por su parte, el director de Medicina Legal, Carlos Eduardo Valdez, afirmó que el juez presentaba un diagnóstico de enfermedad cardiovascular y mental con “estado esquizofrenia y un historial de autoagresión”, y aseguró que la causa de la muerte fue una asfixia mecánica por fractura del tórax.

Valdez advirtió que “Sería irresponsable decir que fue una golpiza. Hay traumas que corresponden a una autoagresión, y otras que no”.