El cabecilla de las Farc, Andrés Paris, se pronunció desde La Habana sobre el atentado terrorista que esa guerrilla realizó en la población de Inzá, Cauca, y simplemente lo minimizó al afirmar que esto es un simple hecho en el marco del conflicto armado colombiano.

Paris dijo que el carro bomba en Cauca hace parte de la confrontación que se presenta en Colombia y para cuya solución se están desarrollando las conversaciones en Cuba.

“Es una acción que hace parte de la confrontación que se desarrolla en nuestro país”, señaló el cabecilla guerrillero y definió el atentado como “una acción armada que podemos tipificar dentro de un asalto a una fortificación militar-policial” ubicada en el centro de una población, algo prohibido por el derecho internacional humanitario.

El ataque se registró sobre las 5:00 de la mañana del sábado en la estación policial de la población, según lo confirmó el teniente coronel Mauricio Cárdenas, comandante de la policía en Cauca.

El Comando de la Tercera División del ejército informó que la explosión se dio en momentos en que la comunidad se encontraba preparando y organizando las actividades de mercado campesino, y explicó que las Farc ubicaron un carro cargado con explosivos.

En el acto criminal perpetrado por integrantes del sexto frente fueron asesinados el mayor Alexander Vargas Castaño, los tenientes Sergio Prada Limas y Jhon Redondo Moreno, el sargento segundo Andrés Felipe Rodríguez, el soldado Jaime Ernesto Lozada Moreno, el subintendente de la Policía Nacional, Enrique Galinde Martínez y dos particulares, al parecer moradores de la región.

El acto terrorista también produjo heridas a siete integrantes de la Fuerza Pública, quienes ya fueron trasladados a centros asistenciales para su pronta recuperación.

Los guerrilleros de las Farc lanzaron morteros artesanales desde una camioneta hacia la estación causando destrozos al puesto de los uniformados, donde también hay militares, y al menos cuatro civiles y cuatro uniformados murieron.

El secretario de gobierno de Inzá, Carlos Alberto Arias, explicó que la detonación “fue justo en el centro de la población, (la estación policial)” y señaló que esa zona “está completamente destruida, otros inmuebles, una casa (cercanos al puesto)… los daños aún no los hemos podido cuantificar”.
Arias destacó que Inzá, con unos 32.000 habitantes, no sufría un suceso similar en años.

Por su parte el director de la Policía, general Rodolfo Palomino, indicó que “Es un hecho muy lamentable, hemos podido conocer de manera preliminar que a bordo de un vehículo que transportaba cebolla habían lanzado unos cilindros contra las instalaciones de la Policía y contra las viviendas aledañas”.