El expresidente Álvaro Uribe Velez admitió que durante su Gobierno recibió ayuda secreta de la CIA, organismo de los Estados Unidos, pero agregó que las operaciones en que se dieron de baja a varios cabecillas del grupo subversivo, fueron planeadas y ejecutadas por colombianos.

La noticia se supo por una publicación del mandatario en su cuenta de twitter en la que reconoció que Estados Unidos “ayudó (a Colombia) para detectar la ubicación” de los guerrilleros y añadió que esos operativos militares se desarrollaron “con hombres y equipos nuestros (colombianos)”.

“Bajo mi responsabilidad fueron (esos) operativos militares”, agregó Uribe.

Al parecer, varios agentes estadounidenses instalaron una unidad de inteligencia en la embajada de Estados Unidos en Bogotá para ubicar, a través de información por satélite, los campamentos guerrilleros. Además se supo que entre los guerrilleros muertos con la ayuda de la CIA, según la información del diario, está Raúl Reyes.

El presidente de Ecuador, Rafael Correa, tras conocer esta información calificó el hecho como “gravísimo” y alertó de que detrás de la revelación pueden estar intereses contrarios al proceso de paz que se viene llevando a cabo hace un año.