El movimiento colombiano de izquierdas Marcha Patriótica denunció estte lunes la muerte de 26 de sus militantes en 2013, doce de ellos a manos de la fuerza pública.
Por esta razón, la ex senadora Piedad Córdoba anunció este lunes que el movimiento político no descarta una posible disolución por falta de garantías políticas y de seguridad.
Durante una rueda de prensa, Córdoba precisó que de ese número de víctimas 15 son campesinos e indígenas que fueron asesinados por sicarios y efectivos del Escuadrón Móvil Antidisturbios de la Policía Nacional de Colombia.
La Marcha Patriótica, muchas veces vinculado por las autoridades con las Farc, nació en abril de 2012 con una gran manifestación en Bogotá que hacía presagiar cambios en el panorama político del país.
Sobre esta cifra de muertos pesa el fantasma de la Unión Patriótica (UP), un partido nacido en los años ochenta a raíz de un acuerdo de las FARC con el Gobierno y que sufrió el asesinato de cerca de 4.000 militantes, entre ellos dos candidatos presidenciales y nueve congresistas.
Según este movimiento, 14 militantes murieron en diferentes regiones del país mediante “asesinatos selectivos”, la gran mayoría en la segunda mitad del año y, por lo general, involucrados en reivindicaciones campesinas, de tierras o contra macroproyectos.
También denunciaron la muerte de doce militantes por la fuerza pública: seis a manos del Ejército, cinco causados por la unidad antidisturbios de la Policía (ESMAD) y otro por un disparo de un soldado en enfrentamientos con un grupo ilegal.
Además, el 21 de agosto desapareció en el departamento del Cauca (suroeste) Carlos Andrés Giraldo, a quien según Marcha Patriótica se le perdió la pista cuando la fuerza pública atacó una concentración de 2.000 campesinos.
En 2014, Marcha Patriótica denunció que un hombre y una mujer fueron torturados y asesinados en el departamento del Chocó (noroeste), así como la desaparición desde el 3 de enero de Mario Arenas Peña en Barranquilla.
Desde la fundación del movimiento en abril de 2012, la organización ha denunciado la muerte de 29 militantes, la desaparición de otros tres y procesos judiciales contra cerca de 200 de sus miembros.
Santa Fe con agencias
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