Los padres de un menor de siete años que murió en días pasados por fuertes traumatismos en Bogotá, han rendido dos declaraciones completamente distintas. La madre afirma que el niño se golpeó en la calle mientras que el padre dice que rodó por las escaleras.
De acuerdo con el primer dictamen de Medicina Legal, Daniel Romero, el menor que falleció el sábado en Engativá, murió debido a un trauma craneoencefálico severo ocasionado por un objeto contundente. Además, tenía heridas en las extremidades inferiores y el tórax, por lo que Carlos Valdés, director de Medicina Legal, afirmó que la muerte de Daniel Romero Sánchez podría haber sido violenta homicida.
Aunque el pequeño fue llevado al centro asistencial por su progenitor, los vecinos del barrio La Riviera, donde residía el menor, hicieron llamadas a la línea de emergencia 123 para reportar que el papá lo había golpeado.
Debido a que la Fiscalía aún no tiene el material probatorio que determine quién fue el responsable de la muerte de Daniel, aún no se ha señalado a nadie por el hecho. Adriana Sánchez, madre del menor, manifestó no querer pronunciarse.
Por otro lado, hay tres versiones de lo sucedido. Los vecinos aseguran que John Romero, el padre del menor, fue el homicida, la madre afirmó que el niño había llegado de la calle golpeado en la cabeza y además, raspado y el padre dijo que se había caído por las escaleras jugando el la propia casa.
Hoy se realizarán sus exequias del menor en la localidad de Chapinero.