El presidente Juan Manuel Santos, se dirigió este jueves a una gran cantidad de atletas colombianos, a quienes les contó las metas que se ha planteado el actual gobierno para este 2014 en materia deportiva, además de los objetivos conseguidos entre 2010 y 2013.

De acuerdo con el mandatario, la mejor forma de inspirar a un país es a través de los logros de los demás, por eso invitó a los medallistas colombianos a contar sus experiencias en este espacio, llevado a cabo en el Centro de Alto Rendimiento de Bogotá, para que otros niños se sientan atraídos por el deporte y forjar así nuevas promesas en el país.

El primero en hablar fue el ciclista antioqueño Rigoberto Urán, subcampeón del Giro de Italia, quien aseguró que fue gracias al apoyo de todo un país que consiguió recorrer sin ningún temor las principales carreteras del país europeo y hacer historia.

«Son las ganas que uno tiene de sacar un país adelante, cuando queremos logramos lo que nos proponemos lo más importante, es tener una meta clara y mirar hacia adelante», dijo el pedalista.

A él se unió la medallista dorada Mariana Pajón, quien le atribuyó sus éxitos a su familia, pues desde muy pequeña la encaminaron en el bicicrós. «La mayor enseñanza que he recibido ha sido de mi mamá, me ayudó a tomar decisiones y creo que tomé la mejor. Eso me inspiró a ganarme esa medalla en nombre de los colombianos», contó la corredora.

Otro atleta que se unió a la charla fue el ganador de una medalla de plata paralímpica, Moisés Fuentes, quien es un claro ejemplo de que los sueños se cumplen.

«Discapacitado es el que tiene todo y no hace nada», fue la frase más destacada de toda la noche, que dio cuenta de que no hay imposibles, sino que la voluntad de querer algo es suficiente.

En este espacio, el presidente Santos destacó el programa Supérate, que nació como una forma de incentivar el deporte desde temprana edad en los colegios y el cual ha tenido un incremento sustancial, pues inició con 800.000 competidores y el año pasado terminó con 1.700.000. La meta para este año será sobrepasar los 2.000.000 de atletas jóvenes, que en unos años serán los futuros medallistas olímpicos de Colombia.

El pesista Óscar Figueroa, aprovechó el conversatorio para hacer algunas peticiones al mandatario, puesto que muchos de los atletas colombianos no reciben los incentivos necesarios para llevar a cabo su carrera y tener una mejor calidad de vida.

El deportista pidió que dentro de una reforma al sistema deportivo, se incluyan estímulos e incentivos para los deportistas y sus entrenadores, quienes a pesar de llenar de gloria al país, no tienen los ingresos suficientes para sostenerse dignamente, asimismo habló de una pensión justa para ellos. «Necesitamos un Supérate en el alto rendimiento», concluyó el deportista, quien prometió que «vamos firmes para Río de Janeiro».

Santa Fe con agencias