Un joven del estado de Sao Paulo (Brasil), fue arrestado este lunes por haber simulado un secuestro con el propósito de conseguir el dinero que su madre había ganado en un sorteo de lotería.
Según lo informaron las autoridades, la mujer había jugado al sorteo “Mega da Virada” junto con 21 funcionarios más del hospital donde trabajaba como limpiadora, pero su hijo, al enterarse del premio decidió eengañarla y simular, junto con un amigo, que estaba secuestrado.
Según informaciones de la Policía Civil recogidas por medios locales, el chico llamó a la madre para decirle que debía entregarle a un amigo de él la cantidad de 250.000 reales (unos 100.000 dólares).
El motivo de pagarle al amigo era que, teóricamente, él había avanzado el pago del rescate, después de haber tenido que vender una casa, un automóvil y una moto. Pero todo era falso.
Durante la negociación del secuestro, esta limpiadora, que había ganado dos millones de reales (unos 800.000 dólares) en el sorteo, llamó a la Policía, que pasó a escuchar las llamadas.
Los investigadores comenzaron a desconfiar de las conversaciones y descubrieron que efectivamente era el hijo quien estaba simulando el secuestro.
La Policía orientó a la mujer que, como apuntaron los supuestos secuestradores, consignara un dinero por debajo de lo que su hijo le pedía y, a través de las imágenes registradas en el banco, se consiguió ver que quien sacaba las cantidades era el chico.
Ambos jóvenes, el hijo y su amigo, fueron enviados a prisión preventiva.
Hace un poco más de un mes hubo otro secuestro a raíz de un premio de lotería, también en el estado de Sao Paulo.
La Policía rescató a dos hermanos -uno de ellos un albañil que había ganado hacía tres meses un millonario premio de lotería- que permanecían secuestrados por dos hombres.
Uno de los secuestradores murió en la operación policial, mientras que el otro fue detenido.
Los hermanos fueron hallados ilesos en un cautiverio en Guarulhos, uno de los municipios del área metropolitana de Sao Paulo, a donde habían sido llevados por la pareja que exigía el pago de 500.000 reales (unos 200.000 dólares) por el rescate.
Santa Fe con agencias