En México, el uso de esta aplicación de mensajería instantánea ha tomado un uso inapropiado, esto según la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal, la cual explica que fotos tomadas de las redes sociales pueden ser usadas para amedrentar a las personas a través de la aplicación.
La secretaría informó que se ha observado un creciente número de extorsiones por medio de la aplicación, que es referida como una de las más comunes por las personas para conversar con amigos o seres queridos.
Eduardo Pliego, subdirector de la Policía de Ciberdelincuencia Preventiva de Ciudad de México afirmó en una entrevista concedida a CNN que las imágenes de hijos y la descripción de los lugares que frecuentan, entre otra información privada divulgada en las redes sociales es usada por los delincuentes para dar a entender a las víctimas que les siguen la pista.
“Estos datos pueden ser utilizados para amedrentarnos, para decirnos que nos van a hacer un daño, que tienen identificados a nuestros hijos, nuestra casa, nuestro vehículo… Pero es una información que nosotros mismos generamos en nuestra red social” expresó Pliego.
Así mismo, el subdirector agregó que en los últimos meses la Policía ha recibido cerca de 30 denuncias a la semana, por parte de ciudadanos que acuden después de haberse convertido en víctimas de chantaje a través de WhatsApp.
Los objetivos más frecuentes de los extorsionadores son usuarios de las redes sociales de entre 25 y 40 años, ya que son estos quienes más suben fotografías de eventos y muestran algún poder económico a través de sus redes.
Es por esto que las autoridades han recomendado aumentar el nivel de privacidad de los perfiles en las distintas redes sociales, esto, para restringir el acceso y proteger la información personal sólo a personas a quienes se ha aceptado por existir una confianza previa.