Todos sabemos que es importante para la salud beber abundante agua; sin embargo, no sabemos exactamente por qué ni conocemos los beneficios que este líquido de la vida hace con nuestra imagen. Lo cierto es que el agua nos ayuda a estar más sanos pero también a ser más bellos.

A continuación presentamos las maravillas que puede lograr con un tratamiento tan simple como tomar entre 6 y 8 vasos de agua diariamente, según la nutricionista Sandra Múnera de Axa Colpatria:

1.Activa la circulación, lo que permite eliminar toxinas y disminuir el cansancio y la pesadez en las extremidades, evitando la hinchazón y la formación de venas varices y celulitis. El cuerpo necesita mecanismos para desechar los tóxicos que recibe de algunos alimentos y la manera más simple de hacerlo es bebiendo agua; de lo contrario estos producirán daños celulares, de tejidos y órganos.

2.Mantiene la piel hidratada. El consumo de agua hidrata la piel desde adentro conservándola joven, elástica, tersa, fresca y luminosa. Ésta hidratación natural es la mejor forma de limpiar la piel y es ideal para quienes sufren de acné.

3.Ayuda a desarrollar y conservar el brillo del cabello gracias a que es un hidratante natural.

4.Facilita la digestión ya que ayuda al organismo a diluir los nutrientes de los alimentos y a eliminar los desechos evitando inflamación. Una buena digestión se siente y se ve, ya que una persona saludable lo refleja en su exterior y cuando el organismo no funciona debidamente se producen molestias y dolor.

5. Por su efecto hidratante mantiene los ojos brillantes.

6. Disminuye la sensación de hambre llenando parte del estómago y ayudando a que las personas no coman en exceso. Esto es de gran beneficio para quienes buscan adelgazar por medio de dietas estrictas.

Además de los beneficios mencionados, que fácilmente se reflejan en la belleza física, el consumo de agua también previene la formación de coágulos, ayuda al buen funcionamiento de los riñones y el corazón y previene las infecciones urinarias y la cistitis.

Por otro lado, la falta de agua hace que el cuerpo retenga líquidos, de manera que los almacena para garantizar el agua necesaria para su funcionamiento. También produce debilitamiento y deshidratación en la piel lo que la deja expuesta a las agresiones externas.

Por esta razón, se recomienda beber entre 6 y 8 vasos de agua durante el día para mantener el cuerpo hidratado y que sus efectos se reflejen también en el exterior a través de los múltiples beneficios que genera este líquido.