La directora General del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, Cristina Plazas Michelsen, indicó que la Entidad realizará una intervención para combatir la desnutrición en La Guajira y fortalecer los procesos de protección de los niños, niñas y adolescentes de las comunidades indígenas.
Plazas Michelsen pidió, ante la Comisión Séptima de la Cámara de Representantes, el apoyo de las autoridades departamentales, los alcaldes, los medios de comunicación y las comunidades indígenas, para verificar el cumplimiento estricto de la misión social del Instituto. Y para que esto sea una realidad se nombrará un Gerente encargado de articular con los diferentes actores para el cumplimiento las metas.
La funcionaria resaltó que “la Guajira, sus familias y sus niños, niñas y adolescentes son una prioridad del Gobierno Nacional”.
“Precisamente, el Presidente Juan Manuel Santos tuvo como primera acción de su segundo mandato, hacer presencia con su equipo de gobierno en La Guajira, para anunciar la perforación de 100 pozos profundos y así enfrentar la problemática de la falta de agua, y extender al ciento por ciento la cobertura de todos los niños y las niñas Wayúu, a través de la estrategia De Cero a Siempre”, dijo la Directora.
Al explicar ante la Comisión Séptima las acciones del ICBF para combatir la desnutrición en los niños, niñas y adolescentes de La Guajira, la Directora enfatizó en que este Gobierno no elude responsabilidades, sino que asume compromisos y entrega respuestas. Agregó que en esa misma línea actuará desde la Dirección del Instituto.
El Instituto inició una microfocalización en Riohacha, Uribia, Manaure y Maicao y se espera llegará más de 200 comunidades, en un tamizaje riguroso para determinar la condición de sus niños, niñas y adolescentes, y disponer su atención en forma inmediata. Esta intervención contempla el suministro de raciones alimentarias de emergencia que cubren a toda la familia. El presupuesto aprobado para realizar este proceso en los 15 municipios del Departamento se estima en 3.500 millones de pesos.
“El ICBF ha liderado de tiempo atrás acciones para mitigar la crisis alimentaria, ha duplicado presupuestos y ha desarrollado acciones para enfrentar un problema tan complejo como el que viven los guajiros”, reiteró la funcionaria. “No debe haber un solo niño muerto por desnutrición o por una enfermedad que se pueda prevenir, ni en La Guajira ni en ninguna otra región de Colombia”.
Así mismo, una de las grandes debilidades para lograr estos objetivos es la ausencia de información detallada de las familias, su composición, ubicación geográfica y necesidades de atención, debido a las condiciones propias del territorio y las características culturales de las comunidades.