A propósito del Cambio Climático: La Tierra alcanzará calentamiento crítico en 30 años
–Las emisiones de gases de efecto invernadero están aumentando tan rápido que si continúan a la tasa actual la Tierra superará un nivel de temperatura crítico en unos 30 años, de acuerdo con tres estudios difundidos en las últimas horas, según lo consigna un despacho de la agencia de noticias DPA.
Dos de los informes fueron publicados en dos diferentes publicaciones de la revista “Nature” con motivo de la Cumbre sobre el Clima de la ONU que se celebra el próximo martes y que fue organizada por el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, para subrayar la urgencia de la aprobación de un nuevo acuerdo global para la protección del clima.
Las emisiones de dióxido de carbono procedentes de la quema de combustibles fósiles y de la producción de cemento aumentaron un 2,3 por ciento en 2013, hasta el récord anual de 36.000 millones de toneladas, según un análisis anual de tendencias realizado por Global Carbon Project.
Dicha tendencia supone que el mundo está en camino de agotar la cuota de 1,2 billones de toneladas de emisiones “en unos 30 años”, o una generación, según Robbie Andrew y Glen Peters, del Centro Internacional para el Estudio del Cambio Climático y Medioambiental (CICERO), con sede en Oslo.
La superación de la cuota de emisiones equivaldría a un aumento de la temperatura terrestre de más de 2 grados centígrados por encima de los niveles preindustriales. En ese caso, el planeta se enfrenta a un dramático aumento de los niveles del mar y sequías letales, advierten los científicos.
Por su parte, el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC) de la ONU señaló que, si no se adoptan medidas preventivas, el mundo se enfrentará a finales de este siglo a aumentos de temperatura de 4 grados centígrados respecto a los niveles preindustriales.
“Serían necesarias reducciones de emisiones globales sostenidas y sin precendentes de cerca del 7 por ciento al año para tener una oportunidad creíble de mantener la cuota”, afirmó Peters en un comunicado de prensa sobre los estudios.
Según el artículo de “Nature Geoscience”, China es el mayor emisor de carbono, siendo responsable del 27,7 por ciento de las emisiones en 2013. Le siguen Estados Unidos, con un 14,4 por ciento, el conjunto de los 28 países de la Unión Europea (9,6%) e India (6,6%).
Según los estudios, la Unión Europea (UE) fue uno de los pocos lugares en los que las emisiones se redujeron en 2013, en concreto un 1,8 por ciento, debido a su débil economía.
“China emite ahora más que Estados Unidos y la UE juntas, y las emisiones de CO2 por persona son un 45 por ciento más elevadas que el promedio global, superando incluso la media de la UE”, afirmó Andrew.
Según el Earth Institute de la Universidad de Columbia, la producción de cemento es responsable de alrededor de un 5 por ciento de las emisiones globales de dióxido de carbono. La caliza (que se emplea para el cemento) emite dióxido de carbono a altas temperaturas y su quema también consume un gran cantidad de combustibles fósiles.
Los autores de los estudios no aportan muchas soluciones alentadoras.
Una combinación de bioenergía con captura y almacenamiento de carbono (BECCS, por sus siglas en inglés) podría eliminar dióxido de carbono de la atmósfera logrando emisiones negativas, afirman los autores en un comentario publicado en “Nature Climate Change”.
“Sin embargo, su credibilidad como opción para mitigar el cambio climático no está comprobada y su uso extendido para la estabilización de supuestos escenarios climáticos podría suponer una distracción peligrosa”, advierten.
Según los autores, los biocombustibles cuentan con una gran limitación física, pues suponen una competencia para la seguridad alimentaria y la biodiversidad.
Además también hay restricciones físicas a la captura y almacenamiento de carbono a gran escala, debido a la incertidumbre sobre la disponibilidad de “la capacidad de un almacenamiento seguro y a largo plazo del carbono”.
También supone un camino incierto la idea de cultivar algas lejos de la costa y fertilizarlas con las emisiones de carbono capturadas, pues se desconoce cómo responderían los océanos, advierten los expertos.
El objetivo de la Cumbre sobre el Clima de la semana próxima es preparar un amplio acuerdo sobre medidas encaminadas a reducir el calentamiento global, que será presentado en una cumbre programada para llevarse a cabo en París a finales de 2015. El Protocolo de Kyoto, firmado en 1997, expiró en 2012. Durante su vigencia, tuvo sin embargo poco respaldo y participación internacional.