–El primer ciudadano diagnosticado en Estados Unidos con el virus del ébola habría contagiado de la enfermedad a otros miembros de su familia y a unas 80 personas más, según lo alertaron los servicios de sanidad.
Se trata de Thomas Eric Duncan, de nacionalidad liberiana, quien llegó procedente de este país a Dallas, Texas.
De acuerdo con una información de la CBS las autoridades ya prescribieron a cuatro de sus familiares mantenerse en cuarentena en casa y evitar visitas hasta el próximo 19 de octubre, cuando termine el período de incubación de la enfermedad, en un intento de prevenir la expansión del virus.
El hecho se derivó de un error del Hospital Presbiteriano de Dallas, al cual acudió Duncan el pasado viernes con fiebre y dolores abdominales, pero los médicos le dejaron volver a casa con antibióticos sin tener en cuenta que venía de Liberia.
Duncan tuvo que volver al hospital el domingo y entonces fue diagnosticado con ébola y aislado.
Sin embargo, en los dos días que permaneció en casa se convirtió en un potencial propagador del virus entre las personas con las que estuvo en contacto, según lo reseña el New York Times, citando autoridades sanitarias.
Duncan llegó a Estados Unidos, donde reside su familia, el 19 de septiembre procedente de Liberia, un país que junto a Sierra Leona y Guinea está en el epicentro de la epidemia del ébola, que ya ha causado más de 3.000 muertos según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Lo peor es que el viaje incluyó varias escalas en Europa.
Tras los primeros síntomas, Ducan acudió al Hospital de Dallas, acompañado por su hermana, quien le advirtió a la enfermera que el paciente acababa de llegar de Liberia.
Sin embargo, según Mark Lester, el vicepresidente del consorcio sanitario al que pertenece el Hospital Presbiteriano de Dallas, dijo en una rueda de prensa que esa información no fue comunicada “ íntegramente a todo el equipo” y por lo tanto no fue tenida en cuenta en la toma de decisiones clínicas”. (Información de agencias internacionales de noticias)
En casa de su familia, donde viven otras cinco personas, Duncan mantuvo contacto además con cinco menores en edad escolar el pasado fin de semana. Los niños fueron puestos bajo supervisión médica, pero por fortuna hasta el momento no muestran síntomas del virus.