–Unidades de la Armada Nacional en operación conjunta con el Ejército Nacional, bajo la cordinación de la Policía Nacional, incautaron 100 kilogramos de explosivos que la guerrilla de las Farc tenía listos para ejecutar atentados terroristas contra la estación de Policía de Colón, ubicada en el casco urbano del municipio de San Miguel, departamento del Putumayo, en la frontera con Ecuador.

En la operación desarrollada por tropas del Grupo de Operación de Comandos Navales de la Fuerza Naval del Sur, la Brigada de Selva 27 y el Departamento de Policía del Putumayo, fueron localizados diez cilindros bomba cargados con 10 kilos de explosivos cada uno, siete rampas, diez detonadores, ocho iniciadores y 60 metros de cable dúplex.

El reporte militar señala que el voluminoso material explosivo pertenecía a estructuras del frente 48 de las Farc, que de acuerdo con información recolectada por las autoridades planeaban acciones terroristas para intimidar y afectar a la población de áreas rurales del Bajo Putumayo.

“Este resultado hace parte de las operaciones adelantadas por la Armada Nacional en el río San Miguel con el fin de evitar el accionar delictivo a través de esta arteria fluvial, que ha sido usada por las Farc para el transporte de sustancias ilegales, explosivos y armas para perpetrar atentados contra la población y la infraestructura energética y vial de la región”, destaca el comunicado.

En lo corrido de 2014 la Armada Nacional ha incautado en el sur del país 4.329 kilos de explosivos y 1607 minas antipersona que serían usados para atentar contra la integridad de los ciudadanos y las tropas.

EN NARIÑO

Mientras tanto en el departamento de Nariño la Policía Nacional logró ubicar material bélico perteneciente al llamado frente comuneros del sur de la compañía José Luis Cabrera Rúales del Eln, con el cual pretendía atentar al paso de una patrulla policial o militar.

La información recolectada indica que sobre la vía que conduce del municipio de Túquerres a Samaniego, los uniformados hallaron 18 explosivos no convencionales, los cuales estaban compuestos por 18 kilos de explosivo R1, 60 metros de cordón detonante, 25 metros de cable dúplex y dos detonadores eléctricos.

Los explosivos fueron desactivados de manera controlada por las unidades de policía.

La Policía Nacional hizo un nuevo llamado a la comunidad para que informe oportunamente cualquier acción delictiva a la línea de emergencia 123.