Una familia canadiense guardó el cadáver de un miembro fallecido durante seis meses con la esperanza de que este resucitara, el cadáver fue encontrado tras un desahucio por parte de la policía.
El cuerpo del hombre de 52 años fue guardado por su esposa durante seis meses en un cuarto de su casa creyendo que este acabaría resucitando, hasta que fue desahuciada de la residencia, el cuerpo se encontraba en estado de descomposición y rodeado de ratas.
Peter Wald vivía tranquilamente con su familia hasta que le fue diagnosticada una diabetes que acabó provocando una infección en su pierna, el hombre nunca acudió al médico ya que confiaba en que Dios lo curaría.
El hombre entró en coma y luego falleció, tras el deceso la familia decidió quedarse con el cuerpo rezando para que este resucitara sin embargo esto nunca sucedió.
La policía declaró culpable a la mujer de no haber notificado a la entidad y al juez de instrucción del fallecimiento de su marido, por esto, la mujer deberá estar un año y medio en libertad condicional.