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No detectaron rastros de pólvora en manos del fiscal Nisman; sin embargo se insiste en hipótesis del suicidio

ARGENTINA- FISCAL MUERTO–La fiscal Viviana Fein, a cargo de la investigación por la muerte de su colega Alberto Nisman, reportó este martes que no se detectaron vestigios o restos de pólvora ni de gases producto de la deflagración en su mano derecha, pero subrayó que este resultado «no descarta que él se haya disparado».

«El resultado del barrido electrónico de la mano de Nisman lamentablemente dio negativo, pero no es un resultado inesperado», expresó Fein en declaraciones a Radio Mitre.

Agregó que «eran muy pocas las partículas de residuos que se levantaron en el lugar». Sin embargo, dijo, «igual, esto no descarta que él se haya disparado».

Según la fiscal, «el calibre pequeño del arma, calibre 22, no permite que el barrido electrónico dé un resultado positivo, es un tema técnico».

Explicó que en caso de armas de pequeño de calibre, como la que se encontró a su lado y que según la investigación causó la muerte al fiscal, «al ser tan ínfima la cantidad de residuos de pólvora que se pueden rescatar es usual que no permita arrojar resultados positivos».

«Esto no descarta que se haya disparado, que haya disparado él. Eso no lo descarta nadie. El resultado de la autopsia ha confirmado de manera categórica que no había una tercera persona en el lugar que haya disparado», precisó la fiscal.

No obstante advirtió que aún queda por determinar los resultados de las pruebas genéticas (ADN) sobre la sangre que había en el arma y en el piso del baño de su departamento, donde se encontró su cuerpo.

El funcionario judicial, de 51 años, apareció muerto el domingo, en la víspera de presentarse en el Congreso a pedido de la oposición, para dar a conocer sus presuntas pruebas para sustentar sus acusaciones contra la presidenta argentina Cristina Fernández, a quien acusó de encubrir a los iraníes acusados de estar implicados en el atentado terrorista con un coche-bomba contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) ocurrido el 18 de julio de 1994, con un saldo de 85 personas muertas y 300 heridas.