Nuevos enfrentamientos se registraron entre indígenas y autoridades en la vía Panamericana a la altura del municipio de Santander de Quinamayó, departamento del Cauca, en donde por lo menos 30 personas bloquearon la vía incinerando una buseta de la empresa Expreso Palmira.

Las autoridades informaron que en enfrentamientos con indígenas, hombres aparentemente armados, salieron a la carretera internacional, desocuparon el automotor, le rociaron gasolina y lo quemaron por completo.

Durante varios minutos estuvo cerrada la vía Panamericana y se registraron fuertes disturbios entre comunidades indígenas, y uniformados del Esmad que trataban de desbloquear la carretera.

Otro automotor afiliado a la empresa Transipiales resultó con daños en una de sus llantas, luego que los sujetos no identificados intentaran incinerarlo, de acuerdo a las autoridades de Tránsito.

Las confrontaciones se presentan desde la semana pasada, luego que las autoridades intentaran desalojar cuatro fincas que desde el mes de diciembre ocupan las comunidades indígenas en el municipio de Corinto.

Óscar Quintero, alcalde de Corinto –donde también se desarrollan las manifestaciones– aseguró que «los aborígenes piden esos terrenos para sus comunidades como resarcimiento por haber padecido varias masacres, en una zona fuertemente afectada por el conflicto armado que azota al país desde hace más de 50 años».

“Ellos tienen una situación que se les presenta desde las masacres que han vivido», después de las cuales, «los gobiernos nacionales les han prometido una cantidad de hectáreas», añadió Quintero.

La Policía restableció el paso por la vía Panamericana y a esta hora son retirados escombros y restos del vehículo que resultó afectado.

El mayor Richard Sanabria, comandante de la Policía de Tránsito en el Cauca informó que se investiga la autoría de la acción, pues las autoridades indígenas negaron la participación de miembros de sus comunidades en estos hechos.