El alto comisionado para la paz, Sergio Jaramillo, resaltó en el foro El Sector Empresarial en la Construcción de Paz de Colombia, la importancia de este sector de cara al postconflicto.
«A mí no se me ocurre que haya otro sector más beneficiado con el fin de la guerra», agregó Jaramillo.
De Acuerdo con Jaramillo, el proceso de paz no termina con la firma de un acuerdo en La Habana. Para el funcionario, solo se trata del inicio de un largo proceso de reintegración social en el que los empresarios, sobre todo en las regiones, jugarán un papel determinante en cuanto a la generación de empleos para reinsertados de la guerrilla.
“En un proceso de paz no basta con la desmovilización y la reincorporación, hay que ser más ambiciosos”, aseguró Jaramillo.
Con el objetivo de cumplir esta meta, el funcionario hizo un llamado a los gerentes reunidos en el foro para que desarrollen estrategias sostenibles para hacerle frente a uno de los retos más complejos de un posible escenario de posconflicto: la reincorporación de unas guerrillas.
El alto comisionado insistió en que los empresarios son y serán los principales beneficiados con la posible terminación del conflicto.
“La verdadera garantía de una paz estable y duradera en los territorios es el fortalecimiento institucional», sostuvo Jaramillo.
En el foro, organizado por la Cámara de Comercio de Bogotá, la Fundación Ideas para la Paz y el Instituto Catalán para la Paz, presentaron una encuesta donde revelaron que el 55 % de los empresarios está de acuerdo con las negociaciones, mientras que un 45 % está en desacuerdo.
También la encuesta reveló que si los logros del proceso de paz se dan, el 85 % indicó que se fortalecería la inversión extranjera.
Finalmente, el estudio también señaló que el 84% de las empresas encuestadas estarían dispuestas a apoyar si existen beneficios relacionados con su negocio.