La Defensoría del Pueblo pidió investigar posibles abusos en el uso de la fuerza por parte la Policía Nacional en un operativo de desalojo realizado por efectivos de la Policía Nacional en el barrio Henequén.

De acuerdo con la Defensoría, en el lugar de los hechos encontró un panorama desalentador por las condiciones en que quedaron las casas de las personas que allí habitaban, algunos de los cuales fueron incinerados por completo.

La Defensoría recibió denuncias de lanzamiento de gases lacrimógenos que habrían afectado a niños, ancianos e incluso personas que nada tenían que ver con el desalojo.

“La Defensoría no desconoce el derecho a la propiedad privada, y por el contrario respeta y acata las decisiones judiciales que propenden por la defensa del mismo, pero considera que cuando existen situaciones especiales y personas vulnerables como las anteriormente mencionadas, incluido un ciudadano de la tercera edad en condición de discapacidad presuntamente afectado por los agentes policiales, es necesario aplicar principios de distinción y proporcionalidad para la salvaguarda de los derechos humanos”, afirmó en un comunicado.

Además de las imágenes que constatan el estado en que quedaron los sitios de alojamiento, la comisión de la Defensoría que visitó el sitio de la diligencia encontró personas mayores y menores de edad que mostraron lesiones aparentemente ocasionadas en desarrollo del operativo, y recibió denuncias según las cuales los uniformados tomaron líquidos y bebidas gaseosas de la comunidad sin permiso alguno.

Al ser informada sobre un acuerdo entre la Alcaldía y la Oficina de Espacio Público a fin de buscar una salida concertada a través de mesas de trabajo, la Defensoría del Pueblo también le solicitó a la administración distrital explicar las razones para anticipar la diligencia, al tiempo que le pidió disponer planes de ayuda humanitaria de emergencia para los adultos mayores, los niños y las personas más desprotegidas en ese sector de la ciudad heroica.

Finalmente, la Defensoría recibió versiones de los agentes policiales, de acuerdo con las cuales jóvenes habitantes de una de las zonas aledañas los atacaron con armas de fuego y otros elementos, ante lo cual la Entidad instó a la Fiscalía para que revise esa situación y de paso haga seguimiento a las denuncias de los ciudadanos.