El secretario de Hacienda (E), José Alejandro Herrera, disipó las dudas en cuanto a la obtención de recursos para la construcción de la primera línea del Metro de Bogotá. Dijo que la ciudad dispone de un variado abanico de fuentes de financiación y precisó las fuentes con las cuales cuenta el Distrito para aportar el 30 por ciento que le corresponde a la construcción del megaproyecto.
De acuerdo con el Secretario, se tienen 2.4 billones de pesos del cupo de endeudamiento -sujetos al Conpes con el gobierno nacional para que incluya el metro, la troncal de la Avenida Boyacá y la reconstrucción de la Caracas- y 3.1 billones de pesos procedentes de las Empresas, si las mismas se convierten en socias del proyecto adelantando la compra del material rodante y los componentes de operación, ya sea mediante la capitalización de las reservas de EEB y ETB, o mediante el apalancamiento de una vigencia futura de 1.7 billones de pesos. De esta manera, sumadas estas dos fuentes, se completan los 4.1 billones de pesos que Bogotá aportará para la suscripción del documento Conpes.
Aclaró que dicha participación no comprometerá la viabilidad financiera ni el flujo de caja de las empresas pues, de requerirse, ésta sería paulatina.
“La decisión del Distrito podría ser capitalizarlas en ese monto, es decir, no retirar las reservas vía distribución de dividendos sino formar capital para que ellas puedan tomar endeudamiento o comprometerse en un proyecto”, puntualizó.
José Alejandro Herrera explicó que por ser un proyecto de largo plazo no es necesario disponer del total de recursos de la obra de forma inmediata, es decir, no se requieren en la caja desde el comienzo, sino que deben estar disponibles durante la etapa constructiva.
Dentro de las posibles fuentes adicionales están la sobretasa a la gasolina, los cobros por congestión, la sobretasa a los parqueaderos, plusvalía y valorización, entre otras. “Ninguna fuente está descartada”, y se puede avanzar en ellas una vez inicie el proyecto, señaló el funcionario.
Por ahora, el Distrito sigue pendiente de la suscripción de un convenio marco entre el Distrito y la Nación antes del 25 de junio, cuando inicia la ley de garantías, a fin de continuar en firme con el metro para los bogotanos.