Este jueves se conoció el caso de una empleada domestica que suministró a dos menores y a su madre escopolamina con el propósito de hurtar pertenencias y objetos de valor de una vivienda donde laboraba en el norte de Bogotá.
Según el testimonio de las víctimas, la mujer agregó la escopolamina en los alimentos de un bebe, un niño de ocho años y su madre, quienes permanecieron inconscientes toda una noche y parte del día siguiente.
“La empleada le suministró escopolamina a mi hija, a su niño de año y medio y a su niño de ocho años”, aseguró Sonia González, familiar de los afectados, quien señaló que aún aturdida, su hija logró denunciar el caso ante la línea 123.
A lo anterior, agregó: “Yo asumo que mi hija quedó dormida y al día siguiente, sobre las 5:00 de la tarde, se desplaza como puede a buscar el teléfono llamando al 123 para dar información del estado en el que se encuentra”.
Mientras tanto Andrea del Pilar Ibáñez, víctima del hurto, afirmó que exámenes médicos avalaron que la sustancia con la que fueron drogados era escopolamina.
“Los exámenes y todos los folios que se adjuntan dentro del proceso, tanto de Medicina legal como por la clínica La Colina, dan positivo para escopolamina”, señaló.
La empleada domestica fue capturada por la Fiscalía General de la Nación y aceptó los cargos por hurto agravado que le fueron imputados ante un juez, aunque negó que haya drogado a la familia.
“Reconozco el robo, porque sé lo que hice, pero cómo van a decir que les di droga”, manifestó la empleada domestica, quien fue traslada a la cárcel de mujeres Buen Pastor, a la espera de recibir una condena por los hechos.