El Banco de la República informó que durante los meses de enero y mayo, la inversión extranjera se contrajo en 33.9 por ciento comparado con el mismo periodo del año pasado.
La situación se genera, debido a un menor interés de la banca internacional por adquirir portafolios de activos locales; así como una desaceleración en la producción y explotación de petrolero, como en la minería.
Según las cifras entregadas por la entidad, los primeros cinco primeros meses del año el país recibió un neto de 7.136 millones de dólares, comparado con 10.800 millones de dólares en el mismo periodo del 2014. Lo que significa que el país dejó de recibir 3.664 millones de pesos este año.
De ese total, la inversión extranjera directa cayó un 13,9 por ciento entre enero y mayo a 5.687 millones de dólares, al tiempo que la destinada a portafolios financieros se desplomó un 56,9 por ciento a 1.948,7 millones de dólares.
En la misma línea, la inversión foránea en petróleo y minería disminuyó un 19,9 por ciento entre enero y mayo a 4.409 millones de dólares, con respecto al mismo lapso del año previo.
La entidad señala que, inversión extranjera en el resto de sectores de la economía aumentó un 16 por ciento a 1.277,8 millones de dólares en el periodo analizado.
Solo en mayo, la inversión extranjera neta en la cuarta economía de América Latina descendió un 32,2 por ciento a 1.499 millones de dólares, contra el mismo mes del año anterior.
Aunque en mayo la inversión extranjera directa subió un 1,40 por ciento a 1.265 millones de dólares, la de portafolio se contrajo un 62,6 por ciento a 381,4 millones de dólares.