–Alias Marco León Calarcá, uno de los cabecillas de las Farc que participa en las negociaciones de La Habana, insistió en las últimas horas en justificar la escalada terrorista que han venido ejecutando en el territorio colombiano y en desarrollo de la cual han derribado torres de energía, destruido puentes y carreteras y derramado más de 10 mil barriles de petroleo, afectando importantes fuentes de agua y causando daños ambientales irreparables. Al efecto sostuvo que no ha sido ni será su propósito afectar a la población civil.

El pronunciamiento lo hizo el cabecilla guerrillero en una nota adicional a un escrito publicado en internet, sin explicar por qué hace tales afirmaciones. Solo dice que «no fue, ni es, ni será propósito nuestro afectar a la población civil, al pueblo del cual somos hijos, al cual pertenecemos y nos debemos. ¡Lo demás es desinformación, es pura y física… carreta!».

La nota la incluye al final de un largo escrito publicado en internet el cual titula «vendiendo la paz» y en el cual fustiga al gobierno colombiano y el empresariado, porque «ya convirtieron la Paz en un negocio y ofrecen sus bondades a las transnacionales».

Al efecto, señala que «vender la Paz ahora, como lo están haciendo y sin ningún pudor, es ni más ni menos, “ensillar sin tener la bestia”, dice la sabiduría popular».

Además precisa que «empresarios y gobierno privilegian el negocio y la ganancia individual por encima de todo, para eso servirá la paz según su óptica, en cambio, las organizaciones populares, la guerrilla entre ellas, consideran la necesaria democracia y la justicia social como los logros de la Paz. Se reflejan así las dos concepciones enfrentadas».

Y concluye: Además, Colombia atractiva para la inversión extranjera con la paz como ingrediente central tiene como objetivo proteger a las transnacionales de los necesarios incrementos en los impuestos y descargar, como siempre, el peso de la tributación entre los sectores menos favorecidos.