La madre del pequeño que murió en una piscina de la estación de bomberos de la localidad de Kennedy en el sur occidente de Bogotá, dijo que el deceso de su hijito fue por “pura y física negligencia”.
“Deben existir responsables del hecho que deberán enfrentar a las autoridades para que la muerte del niño no quede en la impunidad”, dijo Sandra Milena Rizzo, madre del menor.
“Él quería hacer parte del curso de Bomberitos y yo lo apoyé. Me hicieron firmar muchos requisitos para su ingreso y el coordinador de Bomberos me aseguró que tenían todas las medidas de cuidado. Mi príncipe estaba muy contento y feliz y yo igual, pero me lo entregaron muerto”, informó.
El menor fue llevado al Hospital de Kennedy, donde intentaron reanimarlo, pero desafortunadamente falleció.
“Hacia las 10:38 de la mañana el cuerpo de bomberos de la localidad de Kennedy trajo un menor de 7 años de edad sin signos vitales, referenciaban que el niño había hecho una inmersión durante una campaña que hacen ellos de educación a menores de edad”, afirmó el Gerente del Hospital de la localidad, Juan Ernesto Oviedo.
A lo anterior, agregó: “El niño después de las maniobras que se le hicieron en el hospital, no fue posible recuperarlo y como el niño ingresó sin signos vitales, tampoco pudimos reanimarlo”.
El CTI de la Fiscalía realiza las averiguaciones del caso, basados en algunas versiones que fueron entregadas por quienes estaban como responsables de la alberca.