El fundador de la Universidad San Martín envuelto en un escándalo de corrupción por desviación de dineros y oferta educativa sin acreditación, murió en las últimas horas en su mansión de Girardot en donde cumplía una condena de casa por cárcel; beneficio otorgado por el fiscal del caso al considerar que el exdirector padecía una enfermedad grave y en estado terminal.

Alvear fue señalado por las autoridades de ser el cerebro del descalabro al claustro con la desviación de dineros recaudados por lo programas académicos que ofrecía la institución. Además del ofrecimiento de carreras profesionales sin acreditación académica.

Por este hecho, el organismo investigador capturó en la audiencia de imputación de cargos al exdirectivo de la Fundación, a quien se le concedió el beneficio de casa por cárcel por padecer una enfermedad terminal.
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De acuerdo con la Fiscal General, los directivos de la U. San Martín engañaron y causaron daños patrimoniales “graves” a los estudiantes.

El ente investigador estableció que existió una red familiar de fundaciones que se habrían creado alrededor de la Fundación San Martín, y cuyo objetivo era la desviación de dineros.

El rastreo de bienes que hizo la Fiscalía evidenció, que a través de transferencias bancarias usando más de diez entidades financieras, el dinero de los estudiantes y de la Universidad fue trasladado a cuentan en países como México, las Islas Cayman, Estados Unidos, India, Luxemburgo, Taiwán, Alemania, Corea del Norte y Rusia.

Según las investigaciones, las empresas eran controladas por Mariano Alvear, Martín Eduardo Alvear y José Santiago Alvear, y se identificaron “objetos sociales complementarios, operaciones entra las sociedades y reconocimiento público como grupo empresarial, situaciones que evidencian que además del control conjunto, existe unidad de propósito y dirección”.

la Fiscalía señala que casi un billón de pesos provenientes de matrículas y otros ingresos fueron desviados al exterior por los directivos de la universidad para evitar pagar las obligaciones adquiridas con el centro educativo.

El exdirectivo de la U. San Martín era procesado por los delitos de falsedad material, estafa masiva, enriquecimiento ilícito y concierto para delinquir, imputados por la Fiscalía.

Cabe recordar que el Gobierno, en cabeza de la ministra de educación Gina Parody, intervino la institución educativa, y ordenó el cierre del claustro.

Después gracias a un acuerdo alcanzado entre el Gobierno y los directivos de la Universidad, se permitió la continuidad de algunas carreras dentro de la oferta académica avalada por el Ministerio de Educación.
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