El gerente del Banco de la República explicó que la menor dinámica en la oferta de alimentos y el incremento en el costo de las materias primas importadas, así como en la trepada del dólar que llegó a la barrera de los $2.900, cifra que no se registraba desde hace 12 años, son unas de las cusas para la aceleración de la inflación en Colombia.
El gerente del Banco de la República, José Dario Uribe, reconoció que la inflación no va a lograr la meta que se puso el Emisor para este año que es de 3% y agregó que podría situarse en 4,5% al finalizar 2015 como consecuencia de un aumento en los precios de los productos importados y las materias primas.
La menor dinámica en la oferta de alimentos, la transmisión de la depreciación nominal a los precios al consumidor y el incremento en los costos de las materias primas importadas, explican en gran parte la aceleración de la inflación en lo corrido del año” señaló el gerente.
Explicó que aunque el alza del dólar ayuda a mitigar la caída en las exportaciones y es un incentivo para el consumo de bienes hechos en el país, su incremento, que ya supera en lo corrido del año el 21,34 por ciento, también está encareciendo diversos productos importados al punto de comprometer la meta del costo de vida, que este año terminaría no solo por encima del objetivo del 3 por ciento, sino por fuera del tope del rango, fijado en el 4 por ciento.
En su reporte de inflación, Uribe destacó que los anteriores aspectos han desviado la meta en el Índice de Precios al Consumidor (IPC) que tenía el Banco Central para llegar al 3%, en la que había estipulado un rango de control entre 2 y 4 por ciento. “Nuestro equipo técnico ve una inflación que en la actualidad puede estar muy cercana al 4,5% o levemente superior a esto, pero la proyección señala que la inflación caerá el año entrante y se acercará al 3%”.
El gerente del Emisor dijo que no se piensa intervenir el mercado, ni subir las tasas de interés, sino buscar estrategias para que suban las exportaciones y disminuyan las importaciones que en cierta medida pueden afectar el consumo por los altos precios de los productos que llegan al país.
ndicó que el Banco no puede pronosticar un nivel máximo al que pueda llegar el dólar y tampoco un precio en el que se tengan que prender las alarmas ya que la devaluación del peso es un fenómeno natural de la economía.
Explicó que las principales economías del mundo han presentado debilidades que pueden afectar a los países emergentes, sin embargo ahora la política monetaria de Colombia es mucho más fuerte lo que hace que se esté asimilando bien el fenómeno que al parecer será duradero.
Recordó que el precio del dólar ha subido y podrá seguir hacia arriba porque los precios del crudo a nivel internacional han tocado nuevamente sus mínimos niveles.
El petróleo tocó mínimos de seis meses, por debajo de 50 dólares por barril, en medio de débiles datos económicos en las dos mayores economías del mundo y de expectativas de un menor consumo de gasolina en Estados Unidos tras una fuerte demanda en el verano.