Las directivas de los Hospital en los que son atendidos los dos policías que sobrevivieron al accidente del helicóptero Black Hawk, en el que perecieron 17 miembros de la institución, informaron que los uniformados están bajo pronóstico reservado, y su estado es crítico.
El subteniente Edgar Andrés Báez Quintero está siendo atendido en la Clínica Panamericana de Apartadó y está siendo sometido a cirugías, mientras que el patrullero Juan Carlos Mesa Patiño ya fue trasladado a Bogotá para ser atendido por especialistas debido a la gravedad de sus heridas.
Janet Cristina Castaño, jefe médica de la Clínica Panamericana indicó que “los uniformados “tienen fracturas y tienen quemaduras en un área bastante importante de la superficie corporal, su pronóstico es reservado, pero en un estado crítico”.
En un principio el equipo médico de la clínica de Apartadó había informado que el patrullero Juan Carlos Mesa tenía una herida de bala en una de sus piernas, pero luego la Policía Nacional publicó una radiografía de sus piernas para comprobar que no había sufrido ningún impacto de bala en el siniestro.