–La integración de una «alta comisión legislativa» y no un «congresito» sería constituida al interior del legislativo colombiano para implementar los acuerdos de paz que eventualmente se logren concretar con las Farc en La Habana, según se desprende de las conclusiones del encuentro que sostuvo el presidente Juan Manuel Santos con los voceros de la Unidad Nacional en la Casa de Nariño.

Para constituir la alta comisión legislativa se plantea impulsar un proyecto de acto legislativo, de acuerdo con la propuesta hecha en la reunión, en la cual participaron también el jefe negociador del Gobierno, Humberto de la Calle y el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo.

El senador del partido de la U, Armando Benedetti reveló que “lo que se está buscando es eso y ahí sería una ‘Alta Comisión Legislativa’ que en ningún momento reemplazaría al Congreso».

Sin embargo, aclaró, “todo está en abstracto» y añadió que lo que se está buscando es un acto legislativo para que entonces se busque cómo refrendar finalmente los pactos que se hagan y también lo que tiene que ver con la participación política, con el tema de reparación, porque es verdad que se ha avanzado en el tema de víctimas, lo de reparación hace falta muy poquito, lo que tiene que ver con la justicia”.

Por su parte, el ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, manifestó que “cualquier decisión que se tome en esta materia deberá pasar por el Congreso de la República».

Añadió que en este sentido trabajaran de la mano el Gobierno y el Congreso de la República con la Unidad Nacional, «para que lleguemos a una conclusión de cuál es el instrumento más adecuado».

El propósito es que se va a trabajar en los próximos días para intentar tener una idea clara en septiembre, indicó Cristo.

De todas maneras, el ministro estableció que lo que se convenga, “deberá incluir la implementación de los acuerdos, garantizar el tema de participación en política, los temas de justicia transicional, el desarrollo del campo colombiano y otros que están incluidos dentro de los acuerdos de La Habana”.

Apenas una horas antes, el jefe del equipo negociador del gobierno Humberto de la Calle Lombana había hecho claridad en torno al tema de la refrendación y la implementación de los acuerdos, dos temas que hacen parte del sexto punto de la agenda que se discute con las Farc en la Mesa de Conversaciones.

Al efecto, señaló, una cosa es “la aplicación o creación de mecanismos que permitan a la ciudadanía expresar su apoyo o rechazo a los acuerdos a los que podríamos llegar en La Habana y, en segundo término, la adopción de herramientas que permitan a la vez, implementar de manera eficaz la adopción formal –en el marco de la Constitución– de las reformas que se lleguen a pactar, y la garantía a quienes dejen las armas de que estos acuerdos van a convertirse en realidad, respetando lo convenido”.

De la Calle Lombana aclaró entonces, que “el llamado ‘Congresito’ es apenas una de las opciones dentro de los varios mecanismos de Implementación posibles» y que, tal como lo señaló el Presidente de la República, no se refería ni a la revocatoria del Congreso, ni a la derogación arbitraria de los procedimientos constitucionales vigentes”.

En cuanto a la Refrendación, explicó que la Constitución contempla varios procedimientos como el Plebiscito, la Consulta Popular o el Referendo. “Las Farc han agregado a ese elenco, una Asamblea Constituyente. Además, no puede descartarse que los colombianos pongamos en práctica mecanismos nuevos”, dijo.

Sobre uno y otro, insistió en que estas herramientas deben ser discutidas con las Farc. “En el Acuerdo General de La Habana se convino un mecanismo de refrendación. (…) En este momento en la Mesa, estamos ocupados en los puntos relacionados con la Justicia, el Fin del Conflicto y el esquema de garantías necesario para que la guerrilla pueda incorporarse. La refrendación no ha sido todavía materia de discusión formal”.

Finalmente Humberto de la Calle dijo que lo que no puede ocurrir es que si se llega a un Acuerdo en La Habana, el Gobierno, el Congreso y los colombianos en general no hayan reflexionado sobre los métodos para convertir en realidad jurídica lo acordado. “El examen cuidadoso mostrará que no ha existido una sola incoherencia en los anuncios del Gobierno en esta materia. Exhortamos a los colombianos a una discusión serena y razonada sobre esta cuestión que es crucial para Colombia”, puntualizó.