El Instituto Distrital de Recreación y Deporte adelanta labores de mantenimiento a la gramilla, la cual fue afectada por la reaparición de un hongo que actualmente la afecta y que se caracteriza por atacar la raíz de la grama y quemarla en forma de argolla en sectores específicos.
“El daño es estético y no incide en las características reglamentarias del campo como el rebote y recorrido del balón. Tampoco redunda en el sistema de drenaje, ni el desempeño deportivo y físico de jugadores y árbitros” indicó Aldo Cadena, director del IDRD, luego de una revisión a los trabajos de mantenimiento.
Actualmente la cancha se encuentra apta para el fútbol profesional y la condición del gramado no es atribuible al préstamo para conciertos, porque el hongo, denominado Rizoctonia, fue traído por la selecciones internacionales que entrenaron y compitieron en diferentes estadios de Bogotá (Campincito, Techo y El Campín) durante la disputa del Mundial Sub-20 en 2011 y reapareció a mediados de junio.
Una vez terminados los torneos del primer semestre del presente año, se comenzó con un proceso de mantenimiento y mejoramiento de la cancha de El Campín con aireación y micro nivelaciones, teniendo en cuenta que había tiempo suficiente debido al receso por la Copa América.
Una vez terminados los trabajos, a mediados del mes de junio, se empezaron a vislumbrar anillos marrones, típicos del hongo en mención, y desde ese mismo momento se iniciaron la fumigaciones correctivas, así como la suspensión de la fertilización con nitrógeno, usado para mejorar el color de la gramilla.
Teniendo en cuenta que el hongo cambia la tonalidad de la grama infectada, se aplicó sulfato ferroso en estas áreas de manera puntual, para obtener el color ideal de manera rápida. Por tal razón, las zonas afectadas presentan un color más oscuro que el resto de la grama.
Exigencias para mantenimiento de la gramilla
Existe un protocolo muy estricto que se exige a las empresas arrendatarias, que incluye invertir $50 millones en mantenimiento y protección de la grama y drenajes, por cada concierto.
Además, está contratada una interventoría externa para verificar la ejecución correcta de los protocolos agronómicos y avalar los resultados de los laboratorios tomados por la Universidad Jorge Tadeo Lozano.
Los resultados a la fecha son positivos pues los límites de nivelación, compactación, capacidad de drenaje y estado físico de la grama no superan los rangos permitidos, de acuerdo a un segundo concepto entregado por especialistas de la Universidad Distrital.
Adicionalmente a la inversión exigida cuando se arrienda el estadio para eventos de artes escénicas, el IDRD invierte anualmente $150 millones en mantenimiento y recuperación de la grama y se espera que con los cuidados y procesos de recuperación, la grama se recupere en un plazo de 30 días.
El IDRD espera el receso de fin de año para readecuar a fondo la cancha del estadio El Campín, con el objetivo de realizar labores profundas de mantenimiento y revisión del drenaje que no se pueden realizar actualmemente por las labores del torneo profesional de fútbol colombiano.