Este jueves la fundación Lluvia de Amor y Sonrisa denunció el caso de un hombre que obligaba a su hijastro, de ocho años, a consumir cocaína en el municipio de Palmar de Varela, Atlántico.

De acuerdo con Helena Cantillo, coordinadora de la fundación, el menor fue obligado a consumir cocaína que le suministraba su padrastro bajo el argumento de que este era muy hiperactivo. El caso se conoció luego de que el menor presentara comportamientos atípicos.

El menor, agregó Cantillo, se encuentra desde entonces en un hogar sustituto y ha pasado por un proceso de rehabilitación exitoso.

“Tuvimos un caso muy especial de un niño de 8 años consumiendo cocaína, lo que llaman perico. Este es un caso donde el niño permanecía con su padrastro, su mamá trabajaba, venía cada fin de semana o cada 15 días y se presentaba ese inconveniente con ese niño”, explicó Cantillo en una entrevista radial.

Yolanda Ruíz, directora encargada en el Atlántico del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), señaló que estará pendiente del caso e informó que será la coordinadora del Centro Zonal del ICBF de Sabanagrande y la Defensoría de Familia, quienes se encarguen del bienestar del menor.

El caso del niño de 8 años fue puesto en conocimiento de las autoridades de Policía de Infancia y Adolescencia. La identidad del padrastro no fue revelada para evitar entorpecer el proceso de judicialización.

Según Cantillo, la cifra de jóvenes que consumen sustancias psicoactivas es alta, pues de acuerdo con sus indagaciones ha logrado comprobar que durante los fines de semana por lo menos tres de cada cinco menores se encuentran en las calles bajo los efectos del alcohol y sustancias ilegales.