En una entrevista al diario El País de España, el delantero del Atlético de Madrid, Jackson Martínez, dejó entrever cierto malestar por no ser suplente en la delantera de la Selección Colombia, que dirige José Néstor Pékerman.
La pregunta fue: ¿Por qué le cuesta ser titular en la selección cuando es uno de los delanteros más cotizados de Europa? A lo que el colombiano respondió:
“No estoy a gusto con esa situación, pero seguiré yendo a la selección mientras el entrenador piense que puedo aportar cosas. Acepto y respeto su decisión. No puedo decir que lo merezco porque mis compañeros pelean por eso también. Me hubiera gustado haber tenido más oportunidades, pienso que hice un buen trabajo para poder tener más minutos, pero cada entrenador tiene su forma de pensar”.
Frente a otros temas, Jackson comentó como salió de la violencia que se vivía en Medellín.
“A mí me tocó en Medellín, en una época donde la violencia era extrema. Presencié muchos tiroteos en mi barrio, vi muertos. Crecí en un ambiente pesado, pero Dios me ayudó a mantener el foco”.
También confesó el origen de su nombre. “A mi mamá le gustaba mucho Michael Jackson, mi familia estaba peleando por el nombre que me iban poner, pero ella era muy fanática, le gustaba cómo bailaba”.
Para Jackson, el fútbol no es el único deporte que le gusta. “Aprendí el baloncesto en la calle. Jugaba de poste, que es mucho de aguantar el empuje del otro y es más fuerte que en el fútbol. Seguía a los Lakers, pero como en el fútbol, me gustan los buenos partidos, cuando juegan Oklahoma, Chicago, los Celtics”.
Por último, se refirió a su excompañero en el Porto y ahora jugador del Real Madrid, James Rodríguez. “James es un excelente jugador y una gran persona con la que mantengo una buena relación. Quiere superarse cada día, trabaja mucho. Es un referente para toda Colombia”.