Ecuador llegaría a un acuerdo de cooperación judicial para que se Suecia pueda interrogar a Julian Assange
Ecuador nunca ha pretendido “obstruir a la justicia sueca” y está abierto a un acuerdo de cooperación judicial para que se pueda interrogar a Julian Assange en la embajada de Quito en Londres, donde está asilado desde 2012, dijo el presidente Rafael Correa este martes.
“Nunca ha sido nuestra intención obstruir a la justicia sueca, (…) y si se puede llegar a acuerdos con Suecia, que no sea solo para el caso específico de Assange sino en general, en buena hora”, sostuvo Correa en una conferencia de prensa con medios extranjeros.
En ese sentido, el gobierno recibirá en Quito en “los próximos días a una delegación sueca para seguir armando ese acuerdo judicial”, según explicó el Xavier Lasso, canciller encargado, durante el mismo encuentro.
Los dos gobiernos sostuvieron un primer encuentro en Estocolmo el 31 de agosto, en busca de un convenio que facilite a fiscales suecos interrogar a Assange en la embajada ecuatoriana por una denuncia de violación que él niega.
El fundador de WikiLeaks, de 44 años, se libró de acusaciones de agresión sexual que ya prescribieron por vencimiento de términos.
Sin embargo, se mantiene la denuncia por violación que expirará en agosto de 2020.
Correa insistió en que la justicia sueca siempre pudo interrogar a Assange por videoconferencia, pero que rehusó esa opción y solo hasta cuando “iban a prescribir ciertos delitos ahí estuvieron medio apurados”.
El gobierno ecuatoriano señaló que ahora se requiere un acuerdo de cooperación judicial que defienda el asilo otorgado al australiano.
Porque “no es cuestión de golpearnos la puerta y que nosotros actuemos solo como porteros: la abrimos o la cerramos. Debemos poner en claro cuáles son las leyes ecuatorianas, que es lo que estamos defendiendo en el caso de Assange”, expresó Lasso.
Assange pidió asilo a Ecuador ante el temor de que pudiera ser extraditado a Estados Unidos una vez compareciera ante la justicia sueca por denuncias que él siempre ha negado.
Según el periodista australiano, en Estados Unidos podría enfrentar la pena de muerte por la revelación de miles de cables secretos que filtró WikiLeaks, y que pusieron en aprietos a la diplomacia estadounidense.
AFP