La película colombiana ‘El abrazo de la serpiente’, dirigida por Ciro Guerra, fue nominada por la Academia Colombiana de Ciencias y Artes Cinematográficas para participar en la categoría de mejor película extranjera, en los Premios Óscar que se llevarán a cabo el 28 de febrero de 2016 en Los Ángeles.

El film representará al país en la preselección de la categoría de Mejor película extranjera en los premios de Hollywood, por decisión de la Academia Colombiana de Artes y Ciencias Cinematográficas (Accac).

“El abrazo de la serpiente”, dirigida por Ciro Guerra, quien debutó en Cannes en 2009 con “Los viajes del viento”, está inspirada en los diarios de los primeros exploradores que recorrieron la Amazonía colombiana, Theodor Koch-Grunberg y Richard Evan Schultes.

“La película es un relato proveniente de un mundo que permanece oculto a pesar de haber capturado la imaginación de millones de personas durante siglos. Uno de los pocos lugares que aún hoy escapa a la comprensión racional del mundo moderno”, señaló Guerra.

Rodada en los campos del Valle del Cauca, la película que ha emocionado a la crítica europea es la historia de un campesino, cortador de caña, que regresa a su tierra para cuidar a su hijo moribundo mientras resiste la embestida de la “modernidad”, resume el realizador de 31 años.

“Surge del dolor personal y la soledad que me provocó la ruptura de mi familia. Traté de recuperar a las personas que más amaba a través del cine”, explicó el joven director, quien perdió recientemente a su madre y que nunca ha tenido contacto con su padre.

Sin embargo, la obra de Acevedo, que se estrenará en Colombia el 23 de julio, es una denuncia poética sobre “el poder avasallador del progreso” y una reivindicación de la figura del campesino en “su lucha y su resistencia heroica en medio de las duras condiciones de vida”, dijo el director en una entrevista con The Associated Press.

Precisamente, cuando el domingo recibió el galardón y el aplauso unánime de un público compuesto por estrellas de cine, dedicó el premio a los campesinos colombianos para que sepan “que no están solos”.
“Yo quería visibilizar problemas sociales que parecen legitimados a los ojos de la historia”, expresó. Dramas como el desplazamiento o la pobreza resultado del conflicto interno que vive el país desde hace más de medio siglo.

“Hay gente que desea que este guerra que vivimos sea perpetua y no piensan en quienes la sufren. En Colombia somos muchos los que estamos unidos para construir un mejor lugar y los campesinos son los verdaderos héroes olvidados y la base de este país”, dijo. “Los campesinos son actores fundamentales de un conflicto que se olvida de ellos de forma permanente”.

Filmar “La tierra y la sombra” en los campos de caña del departamento del Cauca no fue fácil.

“Todo el equipo se enfermó durante las tres semanas de rodaje porque estás permanentemente respirando un polvo negro de quemar la caña”, relató Acevedo. Además, “mucha gente nos negó los permisos para poder rodar sin que sepamos aún porqué”.

Aunque no nombró a las personas que estarían detrás del boicot, indicó que “gente muy poderosa” no quería que se hablara de las condiciones de vida de los trabajadores del campo.

En su película utilizó actores no profesionales seleccionados entre los campesinos de la región “para reflejar mejor las huellas del campo en la piel”.

Antes de la ceremonia del Festival de Cine de Cannes, “La tierra y la sombra” recibió el premio a la película revelación en la Semana de la Crítica, además del galardón SACD, de la Sociedad de Autores y Compositores, y el premio del público Le Grand Rail D’Or. Era la primera vez que un colombiano hacía tripleta en ese evento paralelo al festival.

Este año el cine colombiano también marcó un hito en Cannes con la presentación de “Alias María” y “El abrazo de la serpiente”, esta última premiada en la Quincena de Realizadores.

“Hace diez años se estrenaban una o dos películas al año, pero en 2015 se llegará a 60 estrenos”, destacó Acevedo. “Estamos construyendo nuestra mirada y nuestra identidad para reflejar todo lo que nos está pasando como país”.

Recién llegado de Francia, recuerda uno de los momentos más emotivos de una gala que le marcará toda la vida.

“Cuando la gente comenzó a aplaudir tanto, -al finalizar la primera proyección en Cannes de ‘La tierra y la sombra’-, yo me salí a llorar. Me quebré. Después de tantos años de trabajo, esto era un verdadero logro. Cuando me di cuenta, detrás de mí estaba el director de fotografía de las películas de David Cronenberg (Peter Suschitzky), quien me dijo, emocionado, ‘Su película es mejor que todo lo que yo he hecho”’.

Acevedo ya está trabajando en su próximo filme, un retrato sobre la violencia narrado desde la perspectiva de los muertos.

“No me interesa la violencia como tal sino y las consecuencias de cómo la guerra destruye los cuerpos, pero también las almas”, dijo.