Mientras la bancada del partido de la U defendió abiertamente el acuerdo de La Habana, entre el Gobierno del presidente Juan Manuel Santos y la guerrilla de las FARC que edifica la justicia transicional, el Centro Democrático elevó serios reparos a la iniciativa, tras advertir que es un camino a la impunidad y perdida de la institucionalidad del país.

Así se desprende del debate que adelantó la plenaria del senado frente al acuerdo de la capital cubana, que fue examinada por las distintas bancadas, con la intervención de senadores como Viviane Morales (Partido liberal) y Eduardo Enríquez Maya (partido conservador), quienes reafirmaron su apoyo al proceso, con el argumento que es una puerta para colocar fin al conflicto armado.

Más adelante, el senador Roy Barreras (partido de la U), consideró que la crítica reiterada de la bancada del Centro Democrático a través de senadores como Paloma Valencia, José Obdulio Gaviria y Alfredo Rangel, no solo es sistemático, sino es una negación a la posibilidad que Colombia conozca la dimensión de la paz, como apuesta de país.

El presidente de la Comisión de Paz del Senado, recordó que el proceso de negociación de La Habana, no es fruto de un encuentro de guerra, sino fruto de un diálogo de paz. “El acuerdo salva vidas. Evita muertes. Para la guerra y defiende la vida, como derechos fundamental de los colombianos”, aseveró.