Otras 31 toneladas de licor nacional e importado fueron destruidas por la Secretaría de Hacienda de Cundinamarca, como parte de las diligencias adelantadas contra presuntos evasores del Impuesto al Consumo y Monopolio Rentístico. Ya son 165 toneladas (más de 150 mil unidades) las reducidas en lo corrido de este año.

Entre estas 21.770 unidades, con un peso de 30.580 kilogramos, se encontraban botellas de cremas de whisky, whisky, ron, vodka, ginebra, diferentes vinos y otras bebidas embriagantes.

Estos elementos, materiales probatorios presuntamente adulterados y de contrabando, fueron aprehendidos durante diligencias o allanamientos que derivaron en procesos administrativos por evasión de impuestos y dejados en custodia con números de noticia criminal por parte de la SIJIN, la DIJIN, el CTI y la Policía Fiscal y Aduanera (POLFA) para su posterior aniquilación.

Vale mencionar que la administración departamental adelanta este procedimiento como parte de la gestión integral de residuos reciclables y reciclables en desuso, y según lo estipulado en el Decreto 4741 de 2005, el cual reglamenta parcialmente la prevención y el manejo de los residuos o desechos peligrosos.

Tecniamsa, Tecnologías Ambientales de Colombia S.A. E.S.P., es la empresa encargada de realizar la destrucción de acuerdo con las siguientes definiciones:

Almacenamiento: depósito temporal de residuos o desechos peligrosos en un espacio físico definido y por un tiempo determinado con carácter previo a su aprovechamiento y/o valorización, tratamiento y/o disposición final.

Disposición final: proceso de aislar y confinar los residuos o desechos peligrosos, en especial los no aprovechables, en lugares especialmente seleccionados, diseñados y debidamente autorizados, para evitar la contaminación y los daños o riesgos a la salud humana y al ambiente.

Residuo o desecho: cualquier objeto, material, sustancia, elemento o producto que se encuentra en estado sólido o semisólido, o es un líquido o gas contenido en recipientes o de pósitos, cuyo generador descarta, rechaza o entrega porque sus propiedades no permiten usarlo nuevamente en la actividad que lo generó o porque la legislación o la normatividad vigente así lo estipula.